COLOSENSES 1 y 2. De la versión en inglés “The Mesagge” ("El Mensaje").
1:
1-2
Yo, Pablo, habiendo sido enviado en misión especial por Cristo como parte del
plan maestro de Dios, juntamente con mi amigo Timoteo, saludo a los cristianos
y seguidores leales de Cristo que viven en Colosas. ¡Que todo lo bueno de Dios
nuestro Padre sea suyo!
Trabajando
en Su huerto
3-5
Nuestras oraciones por ustedes se desbordan siempre en acciones de gracias. ¡No
podemos dejar de agradecer a Dios nuestro Padre y a Jesús, nuestro Mesías, por
ustedes! No dejamos de recibir informes sobre su sólida fe en Cristo, nuestro
Jesús, y del amor que extienden continuamente a todos los cristianos. Los
propósitos y objetivos en sus vidas nunca decaen, están fuertemente atados, reafirmados,
definidos, ya que son parte de su futuro en el cielo, esos propósitos se
mantienen firmes por la esperanza.
5-8
El Mensaje es tan verdadero hoy entre vosotros como la primera vez que lo
oyeron. No disminuye o se debilita a través del tiempo. Es el mismo a través de
todo el mundo. El Mensaje produce fruto y llega a ser más grande y más fuerte,
como lo ha hecho en ustedes. Desde el primer día que escucharon y reconocieron
la verdad de lo que Dios está haciendo, han estado hambrientos por más. El Mensaje
es tan vigoroso, pujante y lleno de energía en ustedes ahora, como cuando lo
aprendieron de nuestro amigo y estrecho colaborador Epafras. ¡Él es un
trabajador confiable y fidedigno por y para Cristo! Siempre puedo contar con
él. Él es quien nos ha contado cómo el profundo amor ha obrado en sus vidas a
través del Espíritu.
9-12
Tengan la seguridad de que desde el primer día que oímos de ustedes, no hemos
dejado de orar por ustedes, pidiendo a Dios para que les dé mentes sabias y
espíritus en sintonía con Su voluntad, y así adquieran un conocimiento profundo
de la forma en que Dios trabaja. Oramos para que vivan bien para el Maestro,
haciéndolo a él estar orgulloso de ustedes a medida que trabajan duro en su
huerto. Mientras aprenden más y más como trabaja Dios, ustedes aprenderán cómo
hacer bien su trabajo. Oramos para que ustedes tengan fuerza y resistencia a
largo plazo, no haciendo las cosas con su propio empeño, sino con la gloriosa fortaleza
que Dios da. Esa es la fuerza que soporta lo insoportable y se derrama en gozo,
dando gracias al Padre que nos hace lo suficientemente fuertes para tomar parte
en todo lo brillante y hermoso que tiene para nosotros.
13-14
Dios nos rescató de callejones sin salida y oscuras mazmorras. Él nos
estableció en el reino de Su Hijo que Él ama tanto, el Hijo que nos sacó del
pozo en el que estábamos, y se deshizo de los pecados a los cuales estábamos
condenados a seguir repitiendo.
Cristo
mantiene todo unido
15-18
Miramos al Hijo y vemos al Dios que no puede ser visto. Miramos al Hijo y vemos
el propósito original de Dios en todo lo creado. Porque todo, absolutamente
todo, todo lo que está arriba y abajo, lo visible e invisible, fila tras fila
tras fila de ángeles, todo se inició en él y encuentra su propósito en él. Él
estaba allí antes de que nada de eso llegara a existir y mantiene todo unido
hasta este momento. Y cuando se trata de la iglesia, él la organiza y mantiene
unida, como una cabeza hace en un cuerpo.
18-20
El fue supremo en el comienzo y, liderando el desfile de la resurrección, él es
supremo hasta el final. Desde el principio hasta el fin él ha estado ahí,
elevado muy por encima de todo, y de todos. El es tan grande, tan amplio, que
todo lo de Dios encuentra su lugar en él sin amontonarse. No sólo eso, sino que
todos los pedazos rotos y desarticulados del universo -la gente y las cosas,
los animales y los átomos- quedan correctamente en su sitio y permanecen unidos,
encajan y embonan en armonías vibrantes, todo a causa de su muerte, de su sangre
que fue derramada desde la cruz.
21-23
Ustedes mismos son una muestra de lo que él hace. Hubo un tiempo en que todos ustedes
estaban de espaldas a Dios, pensando pensamientos rebeldes de él, dándole
problemas en cada oportunidad que tenían. Pero ahora, habiéndose entregado Cristo
por completo en la Cruz, de hecho muriendo por ustedes, él les trajo al lado de
Dios y unió sus vidas a Él, les hizo enteros y santos en Su presencia. ¡No se
alejen de un regalo como este! Manténganse firmes y constantes en ese vínculo
de confianza, poniéndose constantemente en sintonía con el Mensaje, teniendo
cuidado de no distraerse o desviarse. No hay otro Mensaje -solo hay uno. Cada
criatura bajo el cielo, recibe este mismo Mensaje. Yo, Pablo, soy un mensajero
de este Mensaje.
24-25
Quiero que sepan cuánto me alegro de que soy yo quien está sentado aquí en esta
cárcel y no ustedes. Hay una gran cantidad de sufrimiento que se introducirá en
este mundo –la clase de sufrimiento que Cristo lleva consigo. Doy la bienvenida
a la oportunidad de tomar mi parte como miembro de la iglesia en ese sufrimiento.
Cuando me convertí en un siervo en esta iglesia, experimenté ese sufrimiento
como un verdadero regalo, como la forma de Dios para ayudarme a servirles, presentando
toda la verdad.
26-29
El misterio se ha mantenido en la oscuridad durante mucho tiempo, pero ahora está
a campo abierto. Dios quería que todos, no solamente los judíos, conocieran
este rico y glorioso secreto detalladamente, independientemente de su origen,
independientemente de su posición religiosa. El misterio en pocas palabras es
simplemente este: Que Cristo está en ustedes, así que por lo tanto, ustedes pueden
tener la expectativa de participar y tener parte en la gloria con Dios. Es así
de simple. Esa es la sustancia, la esencia de nuestro Mensaje. Nosotros
predicamos a Cristo, amonestando a la gente a no agregar nada al Mensaje.
Enseñamos en un espíritu de profundo sentido común para que podamos llevar a
cada persona a la madurez. Ser maduro es básico. ¡Ser maduro es llegar a ser
como Cristo! Ni más, ni menos. Esto es en lo que estoy trabajando muy duro día
tras día, año tras año, haciendo todo lo posible con la energía que Dios
generosamente me da.
2:1
Quiero que se den cuenta de que sigo trabajando tan duro como puedo por ustedes,
y también para los cristianos en Laodicea. No muchos de ustedes me han visto
cara a cara, pero eso no hace ninguna diferencia. Sepan que yo estoy a su lado,
justo al lado de ustedes. Ustedes no están solos en esto.
2-4
Quiero que entretejan en un tapiz de amor, todo lo relacionado con lo que hay
que saber de Dios. Entonces ustedes tendrán mentes confiadas y en reposo,
centradas en Cristo, quien es el gran misterio de Dios. Todos los más ricos
tesoros de la sabiduría y el conocimiento están incrustados en el misterio y en
ninguna otra parte. ¡Y se nos ha mostrado el misterio! Les digo esto porque no
quiero que nadie les conduzca a ninguna búsqueda inútil, a otros así llamados
misterios, o “Al Secreto”.
5
Estoy muy lejos, es cierto, y es posible que nunca vuelvan a verme, pero
créanme, yo estoy a su lado, justo a su lado. Estoy deleitado y tan complacido
de oír hablar de la forma tan cuidadosa y ordenada en que ustedes dirigen sus
asuntos, e impresionado con la solidez de su fe en Cristo.
De
las sombras a la Sustancia
6-7:
Mi consejo para ustedes es sencillo y claro: Simplemente sigan adelante con lo
que les ha sido dado. Ustedes recibieron a Cristo Jesús, el Maestro; Ahora
vivan en él. Ustedes están profundamente arraigados en él. Han sido bien
construidos sólidamente sobre él. Ustedes conocen el camino de la fe. Ahora
hagan lo que les ha sido enseñado. Hay que salir de la escuela; ¡dejar de estudiar
el tema y comenzar a vivirlo! Y dejen que su vida se desborde en gratitud.
8-10
Cuidado con las personas que tratan de deslumbrarles con grandes palabras y
dobles discursos intelectuales. Ellos quieren arrastrarles y distraerles con
discusiones interminables que nunca llegan a nada. Propagan sus ideas a través
de las tradiciones vacías de los seres humanos y las supersticiones vacías de
seres espirituales. Pero ese no es el camino de Cristo. Todo lo de Dios se
expresa en él, así que ustedes pueden verle y escucharle a él con claridad.
Ustedes no necesitan un telescopio, un microscopio o un horóscopo para darse
cuenta de la plenitud de Cristo, y del vacío del universo sin él. Cuando llegaron
a él, esa plenitud llegó a ser también para ustedes. Su poder se extiende sobre
todas las cosas.
11-15
Entrar en esa plenitud no es algo que ustedes tengan que resolver, descifrar o
lograr. No es un asunto de estar circuncidado o de guardar una larga lista de
leyes. No, ustedes ya entraron a esa plenitud, son iniciados. No a través de un
rito de iniciación secreto sino a través de lo que Cristo ya ha pasado por
ustedes, destruyendo el poder del pecado. Si es un ritual de iniciación lo que
están buscando, pues ya han pasado por ahí presentándose al bautismo. El
bautismo fue un entierro de su antigua vida; el pasar por él fue una
resurrección, Dios les resucitó de entre los muertos como lo hizo con Cristo.
Cuando estaban atorados en su vieja vida de muerte y pecado, ustedes eran incapaces
de responder a Dios. ¡Dios les trajo a la vida! ¡A Su derecha junto con Cristo!
¡Piensen en esto! Todos sus pecados han sido perdonados, la lista se ha borrado,
esa vieja orden de arresto que había en su contra ha sido cancelada y clavada
en la cruz de Cristo. Él despojó en la Cruz a todos los tiranos espirituales en
el universo de su falsa de autoridad y les hizo marchar desnudos por las
calles.
16-17
Entonces, no permitan que ninguna persona los quiera presionar en los detalles
de lo que comen, o en lo referente a los servicios de adoración, o en los días
santos. Todas esas cosas son meras sombras que antecedieron a lo que estaba por
venir; la sustancia, el fundamento, la esencia es Cristo.
18-19
No toleren a personas que traten dirigir su vida, queriendo ordenarles que se
inclinen y se humillen, mientras insisten en que se unan en su obsesión por los
ángeles y en que busquen visiones. Ellos solo son fanfarrones, eso es lo que
son. Están completamente ajenos a la fuente de la vida, que es Cristo, él nos
puso juntos en una sola pieza, y su aliento y flujo sanguíneo es través de
nosotros. Él es la cabeza y nosotros somos el cuerpo. Podemos crecer saludables
en Dios sólo cuando Él nos nutre.
20-23
Así, pues, si con Cristo han dejado atrás todo lo que la religión pretenciosa e
infantil ponía en sus espaldas, ¿por qué se dejan intimidar por ella? “¡No
toquen eso! ¡No prueben eso! ¡No se acerquen a esto!”¿Creen ustedes que las
cosas que hoy están aquí y mañana se esfumarán son dignas de esa clase de
atención? Esas cosas suenan impresionantes si son dichas en voz lo
suficientemente alta. Ellos incluso dan la ilusión de ser piadosos y humildes y
ascéticos*. Pero es sólo otra forma de lucirse, para que ante ustedes parezcan
importantes.
Traducción:
Claudia Juárez Garbalena
*Ascético. adj. [Persona] que se dedica a la práctica
y ejercicio de la perfección espiritual y lleva una vida modesta y sobria. (Nota de traductor).
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