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El corazón de tu Padre. De Joseph Prince


Mateo 7:11 Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre que está en los cielos dará buenas cosas a los que le pidan?

Permíteme contarte una historia verdadera que escuché. Había un pastor cuyo hijo pequeño fue diagnosticado con cáncer. El día que su hijo estaba programado para una operación, este padre clamó a Dios: "Dios, tengo casi 30 años, y mi hijo tiene sólo tres meses de edad. ¿Por qué no tomas unos años de mi vida y se los das a mi hijo?"

Entonces, desde lo más profundo de su interior, escuchó la voz de Dios diciendo: "Yo no soy así". Cuando el hombre escuchó esto, se dio cuenta inmediatamente de que la enfermedad de su hijo no era de Dios. También se dio cuenta de que si él, que tiene fallas, quería el bien de su hijo, cuánto más su Padre celestial. Así que él cambió su oración y dijo: "Padre Dios, vengo contra esta enfermedad y te pido sanidad para mi hijo". Ese día, en la mesa de operaciones, ¡los cirujanos no pudieron encontrar ningún rastro de cáncer en el niño!

Hoy, Dios quiere que sepas que Él no es el tipo de Padre que te quiere enfermo y derrotado, y que te mantiene pobre y en necesidad, que se rehúsa a proveer tus necesidades y te niega Sus bendiciones.

Cuando mi hija Jessica era pequeña, compré un hermoso osito de peluche para ella. Los osos de peluche son sus juguetes favoritos y no podía esperar a ver su gozo cuando lo viera. Mi gozo es verla feliz. Cuando está enferma y tiene dificultades para dormir por la noche, me duele oírla llorar. Cuando está llorando, no puedo ignorar su llanto. Su malestar y dolor se vuelven algo mío aunque sé que su enfermedad es algo que pasará en breve. Cuando ella tiene dolor, yo también siento el dolor. Cuando ella está triste, yo también estoy triste.

Creo que Dios nos da hijos para que nos ayuden a entender cómo es el corazón de nuestro Padre. Su gozo es hacerse parte de tu gozo y verte feliz. Si tú, a pesar de tus fallas, sabes dar buenas dádivas a tus hijos, ¿cuánto más tu Padre celestial te dará buenas cosas cuando se lo pidas? Mi oración hoy es que sepas cuánto te ama tu Padre.

Traducción por Claudia Juárez Garbalena
Extraído del sitio “Joseph Prince Ministries”



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