Realiza grandes hazañas. Joseph Prince

 

Daniel 11:32 pero el pueblo que conoce a su Dios será fuerte y realizará hazañas.

¿Te has preguntado alguna vez qué le da a una persona la fuerza para convertirse en un campeón, como Daniel o David en las Escrituras? El libro de Daniel nos dice que “el pueblo que conoce a su Dios será fuerte y realizará grandes hazañas” (Dan. 11:32).

Daniel mismo comenzó siendo un joven cautivo, sacado de Jerusalén para servir en las cortes de los reyes babilónicos y medo persas. Sin embargo, Daniel destacó entre sus compañeros.

A lo largo de su vida interpretó sueños con la sabiduría de Dios y demostró tener un “espíritu excelente” que la gente que lo rodeaba podía ver (Dan. 6:3). Siempre halló favor ante los ojos de los reyes gentiles a los que sirvió y experimentó liberación sobrenatural cuando parecía no haber escapatoria. Daniel salió ileso del foso de los leones porque conocía a su Dios, Su poder y Su corazón para él.

Querido lector, ¿es esto lo que deseas hoy: caminar con fortaleza, sabiduría y un favor innegable e irresistible? ¿Deseas ver milagros y avances divinos en tu vida?

Entonces te aliento a seguir escuchando y profundizando en tu conocimiento de la gracia y la misericordia de Dios hacia ti. En la historia de Daniel, el Señor, a través de un ángel, se dirigió a él como "varón muy amado" (Dan. 10:11). Así que, cuanto más escuches sobre Su amor por ti y confíes en Él, más vivirás con valentía y un espíritu diferente y excelente que te distinguirá de los demás y dará testimonio de Su poder en tu vida.

Piensa también en el joven David, el joven pastor que tuvo la valentía de desafiar y derrotar a Goliat cuando otros se acobardaban de miedo. David conocía a Dios como un Dios que cumple Su pacto y lo amaba. David habría recordado el amor de Dios por él cada vez que oía su nombre, pues el nombre de David significa “amado”, el amado del Señor.

Creo que David se convirtió en un adorador extraordinario, un líder amado por su pueblo y un hombre conforme al corazón de Dios porque sabía y era consciente de cuánto lo amaba el Señor. Incluso cuando David fracasó, creo que fue la revelación de que aún era amado por el Señor lo que lo impulsó a seguir adelante.

Amado, oro para que al continuar leyendo la palabra de Su gracia y escuchando los mensajes de Su gloriosa gracia, llegues a conocer verdaderamente el amor del Señor por ti y lo abraces de corazón. Su amor te fortalecerá y te impulsará a realizar grandes hazañas.

Cuando sepas cuánto te ama Dios, derribarás a los gigantes en tu vida, y tu vida dará testimonio de Su bondad y gloria.