La clave para una fe robusta. Notas de sermón del Pastor Joseph Prince
Estas son notas sobre el
sermón, “La clave para una fe robusta”,
predicado por el Pastor Joseph Prince el domingo 23 de septiembre de 2018, en el
Centro de Artes Escénicas “The Star”, en Singapur. Esperamos que las notas de este
sermón sean de aliento para ti.
Visión
general
¿Alguna vez te has
preguntado qué significa realmente tener una gran fe?
Esperamos que estas notas
te ayuden a entender:
·
Cómo tener una gran fe y recibir tu
liberación,
·
Qué detiene la fe en su proceso, y
·
Cómo la fe te empodera para que fluya el
suministro ilimitado de Dios de salud, gozo, fortaleza y más.
En este sermón, el Pastor
Prince comparte cómo cuando miramos al Señor ante todo y sobre todo, podemos
tener una fe robusta que libere Sus bendiciones en nuestras vidas al máximo,
como se ve en las historias verdaderas de personas en la Biblia.
_______________________________
Introducción
El Pastor Prince comparte
cómo la revolución de la gracia está ocurriendo por todo el mundo, y cómo, como
creyentes, todos somos parte de ella.
La gracia no es algo
nuevo, es algo que está siendo restaurado al cuerpo de Cristo.
El evangelio de la gracia
no es solo algo para salvar almas. Lo es todo para nosotros.
Cristo es el regalo más
grande de Dios para todos nosotros (Ro. 8:32).
Si Dios retuviera la
provisión y la sanidad para ti, entonces estaría diciendo que estas bendiciones
son más preciosas que Jesús.
No amigo. Cuando Dios
entregó a Jesús, nos dio sanidad, provisión, vida abundante, favor y vida
eterna. La iglesia necesita volver a la simplicidad de confiar en la bondad y
la gracia de Dios.
Aquel que no fue
escatimado fue aquel a quien Dios amó: "Este es mi Hijo amado, en quien
tengo complacencia" (Mateo 3:17).
Nunca sabrás cuánto te
ama Dios hasta que sepas cuánto ama Dios a Jesús.
Por eso es importante que
estudiemos los nombres de Jesús. Al encontrarlo a Él, nos encontramos a
nosotros mismos.
El mayor conocimiento de
todos es este: “que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo,
a quien Tú has enviado” (Juan 17:3).
Hoy, si eres un creyente,
Dios no está tratando contigo conforme a tus pecados, sino conforme al Hombre
glorioso (Jesús) a Su diestra.
Lo que Jesús merece, tú
lo tienes. De la misma forma que en la cruz Jesús llegó a ser pecado por
nosotros, y sufrió las consecuencias del pecado (por ejemplo, la enfermedad),
así también nosotros que hemos pecado contra Dios, hemos sido hechos justicia
de Dios en Él, con todas las bendiciones que eso implica.
Tiempo de orar y ministrar.
El Pastor Prince ministra
a personas preciosas en la congregación que están enfermas y ora por aquellos
que tienen:
·
Padecimientos en el hígado y estómago
·
Padecimientos en el hombro derecho
·
Crecimientos y tumores en el cuello,
columna vertebral e hígado
·
Quistes y fibromas
·
A alguien con dolor en la parte superior
de brazo izquierdo que había estado allí por algún tiempo
·
A alguien con un coágulo de sangre en el
cerebro
El Pastor proclamó
Proverbios 3:25 sobre el miembro de la iglesia con el coágulo de sangre en su
cerebro: "No tendrás temor de pavor repentino, ni de la ruina de los
impíos cuando viniere…" y le aseguró que no debe temer a la muerte
repentina.
El Pastor Prince ministró
además:
·
Padecimientos musculares
·
Temores a quedar con demencia o
padecimientos en la memoria.
El Pastor declara que
Dios hizo al hombre con una memoria perfecta. Adán podía nombrar a todos los
animales, y nosotros tenemos la mente de Cristo. Solo porque el cuerpo envejece
no significa que tengamos que rendirnos a las fuerzas naturales. Moisés podía
referir o citar todo lo que ocurrió en el desierto y todas las leyes de Dios
cuando tenía casi 120 años.
También ministró:
·
Problemas para dormir que no pueden ser
aliviados con medicamentos, y a personas con pesadillas a causa de medicamentos.
El Pastor les recordó que
Dios es el que a Su amado dará Dios sueño (Salmos 127:2).
Ministró:
·
Sordera parcial en el oído izquierdo.
·
Enfermedad de Parkinson
El Pastor Prince dice a quienes
les ha ministrado que se vean a sí mismos en el televisor de su mente, que
correrán y no se cansarán, caminarán y no se fatigarán (Isaías 40:31). Él los
alienta a agradecer al Señor por sanidad y la verán detonarse en sus cuerpos.
El Pastor invita a los
miembros de la congregación a orar por sus compañeros en la congregación.
A veces Dios nos da
sentimientos para ayudarnos a darnos cuenta de que Él está haciendo algo.
El Pastor comparte que la
sanidad es un regalo de gracia que podemos recibir sin importar cuán buenos
seamos.
El Pastor Prince también
se dirige a las personas cuyas condiciones no fueron nombradas y les asegura
que el Señor conoce sus padecimientos, y no están solos en su lucha.
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Nuestra
fe no debe estar en nuestra fe, sino en el Señor. No limites lo que Él puede
hacer.
Salmos
78:41 Y volvían, y tentaban a Dios, y provocaban al Santo de Israel.
Limitamos a Dios por lo
que dicen otras personas, por falsas doctrinas que se han infiltrado en la
iglesia, o por experiencias en lo natural.
Mateo
9:28 Y llegado a la casa, vinieron a él los ciegos; y Jesús les dijo: ¿Creéis
que puedo hacer esto? Ellos dijeron: Sí, Señor.
29
Entonces les tocó los ojos, diciendo: Conforme a vuestra fe os sea hecho.
Nota que Jesús no dijo:
"¿Crees que puedes ver?", sino "¿Creéis que puedo hacer
esto?"
Nuestra
fe no debe estar en nuestra fe. Nuestra fe debe estar en él.
El Pastor Prince comparte
sobre un padre en la Biblia cuyo hijo fue poseído por un espíritu mudo. El
padre dijo: "... Si puedes hacer algo, ten compasión de nosotros y
ayúdanos".
Y Jesús respondió:
"Si puedes creer, al que cree todo le es posible" (Marcos 9: 22-23).
Aquí, Jesús no le estaba
poniendo la responsabilidad al hombre de creer, en la traducción en inglés “Young’s
Literal Translation” (YLT), el versículo dice: "... todo es posible para aquel
que está creyendo", refiriéndose a Él mismo.
Lo que Jesús está
diciendo es: “Conecta tu pequeña fe conmigo. No se trata de tu fe, sino en
quién está tu fe. Todo lo que quiero que creas es que todo es posible para Mí,
y yo siempre estoy lleno de fe". Como dijo el apóstol Pablo: "Vivo
por la fe del Hijo de Dios, el cual amó y se entregó a sí mismo por mí” (Gálatas
2:20).
Entonces,
cuando mires una situación, no te preguntes si puedes creerle a Dios por eso,
¡sino si Jesús puede creerle a Dios por eso!
Cuando
estamos bajo la ley, la fe no puede operar
Romanos
4:13 Porque no por la ley fue dada a Abraham o a su descendencia la promesa de
que sería heredero del mundo, sino por la justicia de la fe.
14
Porque si los que son de la ley son los herederos, vana resulta la fe, y
anulada [“sin efecto” KJV] la promesa.
Digamos que estás
creyendo a Dios por la sanidad de tu hijo, pero una voz te dice: "No has
orado lo suficiente. No has leído tu Biblia lo suficiente. No eres lo
suficientemente bueno. ¿Recuerdas lo que hiciste el otro día?
Comienzas a evaluarte a tí
mismo basándote en lo que has hecho o no has hecho, en lugar de en la bondad
del Señor y lo que Él ha hecho en la cruz.
En lugar de poner tus
ojos en Jesús, pones tus ojos en ti mismo, y eso es realmente ponerte bajo la
ley.
En el momento en que te
pones bajo la ley, la fe no puede operar.
Todo
se trata de la fidelidad de Dios, no de la nuestra
El Pastor comparte cómo
ninguno de los israelitas murió durante su viaje de Egipto hasta el Sinaí, una
imagen o retrato de la pura gracia.
Dios no los sacó de
Egipto por la fidelidad de ellos, sino por Su fidelidad, por el pacto
incondicional que hizo con Abraham antes de que siquiera existiera la ley.
La ley tiene qué ver con
nuestro comportamiento, pero la cosa asombrosa es que cuando vivimos a través
de la fe, eso purifica nuestros corazones, lo cual afecta nuestra conducta.
Sin embargo, cuando
tratamos de ser buenos, terminamos siendo malos (ver Romanos 7).
Conocer
a Jesús es el secreto para tener una gran fe
Solo se dice de dos
personas en los evangelios que tuvieron una gran fe: el centurión romano cuyo
criado estaba enfermo, y la mujer sirofenicia.
A pesar de que eran muy
diferentes (en género, en ocupación, y donde vivían), tenían un común denominador:
ambos eran gentiles, por lo que no conocían la ley, pero conocían a Jesús.
La ley siempre te dice:
"Espera un momento, no has hecho lo suficiente". Dios dio la ley para
que el hombre sea consciente del pecado, no para producir excelencia moral. Fue
nuestro maestro de escuela para traernos hasta Cristo.
Ahora que la fe ha
llegado, ya no estamos bajo el ayo de la ley. No debemos ser conscientes del
pecado, y permitir de ese modo que la ley nos prive de creer en Dios con una fe
robusta.
Puedes
tener fe en que Dios contestará tus oraciones, incluso cuando hayas fracasado
Los únicos mandamientos
para el creyente hoy son: cree en el Señor Jesucristo y ámense los unos a los
otros. Y una forma de hacerlo es orar unos por otros.
Job se liberó de un año
de cautiverio cuando oró por sus amigos.
La primera vez que la sanidad
es mencionada en la Biblia es cuando Abraham oró, y Dios sanó a Abimelec, a su
esposa y a sus esclavas para que pudieran tener hijos nuevamente. Ahí, Abraham
acababa de mentir acerca de que su esposa Sara era su hermana (ver Génesis
20:1-17).
En Génesis 21:1-2, Sara
concibió y dio a luz a Isaac.
Abraham
fue un hombre que no merecía orar por otro hombre que tampoco merecía la
oración. Sin embargo Abraham oró para que la matriz de otros fuera abierta, y
Dios abrió la matriz de su propia esposa.
La
fe es saber que el Señor está contigo, y confiar plenamente en Él.
Jueces
1:19 Y Jehová estaba con Judá, quien arrojó a los de las montañas; mas no pudo arrojar
a los que habitaban en los llanos, los cuales tenían carros herrados.
Si el Señor estaba con
ellos, los carros de hierro bien podrían haber sido hechos de papel de baño.
Este es el mismo Señor que derribó al gigante Goliat con una sola piedra lanzada
por David, quien tuvo fe en Él.
Jueces1:1
Aconteció después de la muerte de Josué, que los hijos Israel consultaron a
Jehová, diciendo: ¿Quién de nosotros subirá primero a pelear contra los
cananeos?
2
Y Jehová respondió: Judá subirá; he aquí que yo he entregado la tierra en sus
manos.
3
Y Judá dijo a Simeón su hermano: Sube conmigo al territorio que se me ha
adjudicado, y peleemos contra el cananeo, y yo también iré contigo al tuyo. Y
Simeón fue con él.
4
Y subió Judá, y Jehová entregó en sus manos al cananeo y al ferezeo; e hirieron
de ellos en Bezec a diez mil hombres.
Judá significa alabanza.
En todos tus desafíos, lo primero que debes elevar al Señor es alabanza. En los
buenos tiempos, alaba al Señor, en los malos tiempos (por ejemplo, si estás atrapado
en un embotellamiento), alaba al Señor de todos modos.
El Señor quería entregar
la tierra solo en manos de Judá, pero Judá quiso llevar a Simeón.
Todos nosotros queremos
apoyo de la carne. Moisés en la Biblia también dijo que él no era elocuente, y al
final Dios tuvo que hacer que Aarón fuera su portavoz (Éxodo 4:10-17).
Cuando
Dios te llama, Él te equipará. Cuando limitas a Dios, tu victoria será
limitada. Verás esa limitación donde no estés confiando en Dios.
La
fe es buscar el consejo de Dios primero y ante todo
Pide consejo a Dios antes
de que se lo pidas al hombre, no importa cuán piadoso éste sea. No corras
primero al médico, porque pueden cometer errores y tu vida es demasiado valiosa
para eso.
Busca primero al Señor,
Él puede darte paz y arreglar las circunstancias (por ejemplo, brindarte el
médico adecuado para ti). Pero de esta forma, tu confianza estará en el Señor, y
no en el médico, porque ya oraste.
Para aquellos que están
creyendo por tener hijos, el Señor también puede guiarlos a realizar una fertilización
in vitro. No hay vergüenza en eso, ya que toda buena dádiva y don perfecto (de lo
cual forman parte los tratamientos médicos) proviene de lo alto. Pero búscalo a
Él primero.
Dios
prioriza la fe excelente, como se ve en Hebreos 11:32-33
No hay ningún detalle
insignificante en la Biblia. Cada palabra es inspirada.
Hebreos
11:32 ¿Y qué más digo? Porque el tiempo me faltaría contando de Gedeón, de
Barac, de Sansón, de Jefté, de David, así como de Samuel y de los profetas;
33
que por fe conquistaron reinos, hicieron justicia, alcanzaron promesas, taparon
bocas de leones…
Cronológicamente
hablando, Barac vino antes que Gedeón, Jefté antes que Sansón, y Samuel antes
que David. Pero las menciones de sus nombres se invierten, porque Gedeón,
Sansón y David tuvieron una fe más excelente que sus antecesores.
Gedeón
y Barak
Barac le dijo a Débora,
quien era juez de Israel en ese momento (Jueces 4:3-4): “Si tú fueres conmigo,
yo iré; pero si no fueres conmigo, no iré”. Y, Barac pensó: “así destruiré a
Sísara, el comandante del ejército del rey Jabín” (Jueces 4:8).
Al final, fue una mujer,
Jael, quien mató a Sísara (Jueces 4:9).
Pero los ojos de Gedeón
estaban en el Señor (a pesar de que preguntó al Señor acerca de los vellones).
Barac, sin embargo, puso sus ojos o su confianza en una mujer.
Sansón
y Jefté
Jueces
15:15 Y hallando una quijada de asno fresca aún,
extendió la mano y la tomó, y mató con ella a mil hombres.
16
Entonces Sansón dijo:
Con la quijada de un asno, un montón, dos
montones;
Con la quijada de un asno maté a mil
hombres.
17
Y acabando de hablar, arrojó de su mano la quijada, y llamó a aquel lugar
Ramat-lehi.
18
Y teniendo gran sed, clamó luego a Jehová, y dijo: Tú has dado esta grande
salvación por mano de tu siervo; ¿y moriré yo ahora de sed, y caeré en mano de
los incircuncisos?
19
Entonces abrió Dios la cuenca que hay en Lehi; y salió de allí agua, y él
bebió, y recobró su espíritu, y se reanimó. Por esto llamó el nombre de aquel
lugar, En-hacore, el cual está en Lehi, hasta hoy.
“Hallando
una quijada de asno fresca”: Según la ley, Sansón habría fallado,
porque estaba bajo el voto del nazareo que establecía que no podía tocar
cadáveres.
Pero
la fe trasciende el tiempo y el espacio. Y el Señor forjó una victoria para él.
Cuando Sansón estaba
dolorido, clamó al Señor. Y le dio a Dios la gloria: "Tú me has dado esta gran liberación ..."
Jefté, por otro lado,
recurrió a un trueque con el Señor, mostrando una fe débil porque no tenía una relación
con Dios:
Jueces
11:30 Y Jefté hizo voto a Jehová, diciendo: Si entregares a los amonitas en mis
manos,
31
cualquiera que saliere de las puertas de mi casa a recibirme, cuando regrese victorioso
de los amonitas, será de Jehová, y lo ofreceré en holocausto.
Al final, fue la hija de
Jefté la que salió a su encuentro. Aunque Jefté no tuvo que matarla (ya que el
Señor no acepta ofrendas humanas), tuvo que permanecer soltera toda su vida.
David y el profeta Samuel
1
Samuel 8:1 Aconteció que habiendo Samuel envejecido, puso a sus hijos por
jueces sobre Israel.
2
Y el nombre de su hijo primogénito fue Joel, y el nombre del segundo, Abías; y
eran jueces en Beerseba.
3
Pero no anduvieron los hijos por los caminos de su padre, antes se volvieron
tras la avaricia, dejándose sobornar y pervirtiendo el derecho.
Aunque David amaba a sus
hijos, nunca los puso en posiciones de autoridad, a diferencia del profeta
Samuel. Fue el hijo de David, Absalón, quien intentó usurpar su trono. David
tuvo fe en la decisión de Dios.
Si bien el carácter del
profeta Samuel fue asombroso, David tuvo una fe que el Señor aprobó.
Incluso
personas comunes pueden caminar en excelencia de fe
Esto se ve en la forma en
que los profetas son mencionados en Hebreos 11:32. Todas las personas
mencionadas en este versículo también eran personas comunes, excepto David (el rey).
Cuando
tu fe está en el Señor, permaneces fuerte y feliz
Abraham y Sara se rieron
cuando Dios les dijo que serían padres. Y el nombre de su hijo Isaac significa “risa”.
Cuando Sara escuchó que
iba a tener un bebé, se echó a reír y dijo: "¿Tendré placer?" No
dijo: "¿Tendré un bebé?" Entonces ella estaba diciendo: "Si
disfruto con mi señor, el bebé vendrá".
El cristianismo se trata
acerca del gozo del Señor. No se trata de "tienes que estar gozoso,
caramba", eso es una ley. Se trata de saber que el Señor se regocija sobre
ti con cánticos.
Confía
en Dios, y tendrás resultados ilimitados
Si confías en que tus
habilidades sean moralmente excelentes, estás limitado. Pero si confías en el
Señor como tu santidad, redención y sabiduría, el resultado será sobrenatural.
El Señor no está
limitado. Nosotros lo limitamos.
Cuando él alimentó a los
5,000, les dio tanto como ellos quisieron (tiempo activo imperfecto en Juan
6:11). Mientras la gente seguía comiendo, el suministro seguía fluyendo.
Ten
la independencia de la fe
No escuches este sermón y
digas: “Yo solo necesito fe en Dios. Dios y yo somos suficientes”. Esa es la
independencia de la carne.
En vez de eso, ten
independencia en la fe, eso quiere decir que tus ojos están en el Señor, pero
sigues Su guía cuando Él te dice que invites a alguien a la iglesia, o que vayas
a un líder o consejero para pedirle consejo.
Salmo 1:1 “Bienaventurado
el hombre que no anda en el consejo de malos”, así que primero
busca al Señor, luego sigue Su guía.
Cierre
El Pastor Prince pronuncia
Deuteronomio 33:25 sobre la gente y dice que el mundo dice que te debilitarás a
medida que envejezcas, pero Dios dice que cuanto más viejo eres, más fuerte serás.
Deuteronomio
33:25 Hierro y bronce serán tus cerrojos, y como tus días serán tus fuerzas.
Cuando confías en el
Señor, se te abre una cisterna inagotable de Su provisión. En todos tus
razonamientos, nunca dejes a Dios fuera de tus cálculos.
El Pastor Prince ora por
protección, favor, por paz shalom, por la salud y el bienestar de Dios en la
congregación.
****************
¡Esperamos que las notas
de sermón te hayan bendecido! Si lo hicieron, te animamos a que obtengas el
sermón y permitas que el Señor te hable personalmente mientras lo miras o
escuchas.
©
Copyright JosephPrince.com 2018
Las
notas de este sermón fueron tomadas por voluntarios durante el servicio. No son
una representación textual del sermón.
Traducción por Claudia Juárez Garbalena
Muchas Gracias Claudia, ha sido una Gran Bendición para mí Vida.
ResponderEliminarGracias estimada hermana por su gran aporte para mi avance espiritual. Dios le siga usando poderosamente.
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