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SALMOS 103 De la Versión en inglés “The Message”

1-2 ¡Oh alma mía, bendice a Dios!
¡Con todo mi ser, bendeciré Su Santo Nombre!
Oh alma mía, bendice a Dios,
¡No olvides ni una sola de Sus bendiciones!

3-5 El perdona tus pecados, todos y cada uno de ellos.
El sana tus enfermedades, todas y cada una de ellas.
Él te redime del infierno, ¡salva tu vida!
Él te corona con amor y misericordia, con una corona celestial.    
Él te envuelve y arropa en bondad, Su bondad hermosa y eterna.
Él renueva tu juventud, eres siempre joven en Su Presencia.

6-18 Dios hace que todo nos ayude a bien;
Él pone de pie a aquellos que son víctimas.
Él le mostró a Moisés cómo llevó a cabo Su Obra,
Desplegó Sus planes para todo Israel.
Dios es absoluta y pura misericordia y gracia;
No se enoja fácilmente, Él es rico en amor.
Él no se fastidia y nos regaña una y otra vez hasta la saciedad,
Ni guardar rencor para siempre.
Él no nos trata como merecemos por nuestros pecados,
Ni nos devuelve a totalidad lo que obtenemos por nuestros errores.
Tan alto como el cielo está por encima de la tierra,
Así de grande es Su amor para quienes le temen.
Y tan lejos como está la salida del sol de la puesta del sol,
Nos ha separado de nuestros pecados.
Como los padres se sienten por sus hijos,
Así se siente Dios por aquellos que le temen.
Él nos conoce por dentro y por fuera,
Siempre tiene en cuenta que estamos hechos de barro.
Hombres y mujeres no viven mucho tiempo;
Como las flores brotan y florecen,
Pero una tormenta les extingue con la misma rapidez como florecieron,
Sin dejar rastro que demuestre que estuvieron aquí.
El amor de Dios, sin embargo, permanece y para siempre,
Está eternamente presente para todos los que le temen,
Enderezando todas las cosas para ellos y sus hijos
A medida que ellos siguen los caminos de Su Pacto
Y recuerdan hacer todo lo que Él dijo.

19-22 Dios ha establecido Su trono en el cielo;
Él gobierna sobre todos nosotros. ¡Él es el Rey!
Entonces bendigan a Dios, ustedes Sus ángeles,
Que están listos y son capaces de salir corriendo a Su mandato,
Que están prontos para escuchar y hacer lo Él dice.
Bendigan a Dios, todos Sus ejércitos de ángeles,
Que están alertas para responder a lo que sea Su voluntad.
Bendigan a Dios, todas Sus criaturas, dondequiera que estén:
Bendigan a Dios todas las cosas y todos los seres hechos por Dios.
Y tú, alma mía, ¡Bendice a tu Dios!


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