“MISERICORDIA QUIERO, Y NO SACRIFICIO”. Por Claudia Juárez Garbalena
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Publicado originalmente el 12 de septiembre de 2014.
Publicado originalmente el 12 de septiembre de 2014.
Hay varias razones por
las cuales el ministerio terrenal de nuestro Señor Jesucristo fue EXITOSO. No
hablo precisamente de las masas que se agolpaban a escucharlo, lo cual se
considera hoy en día un sinónimo de éxito en un ministerio, ya que él fue
directamente rechazado por los judíos como su Rey y su Mesías. Pero sí hablo
del rotundo éxito de nuestro Señor y Salvador viviente Jesucristo en traer la
voluntad de Dios a esta tierra, y en su obra perfecta y finalizada con la cual
obtuvo eterna redención para toda la humanidad y la creación entera.
Quiero hacer notar dos
puntos relevantes en el ministerio de nuestro Señor Jesucristo que
definitivamente lo llevaron al éxito:
·
Primero, Jesús no solamente obtuvo un gran
conocimiento de las Sagradas Escrituras, sino que comprendió la intención y voluntad
de Dios en ellas. Llegó a conocer al Autor de la vida y de la Palabra de Dios,
y supo discernir, entender y aplicar Su perfecta voluntad en esta tierra; él
llegó a COMPRENDER Y A CONOCER EL CORAZÓN DE NUESTRO PADRE, ¡DE SU ABBA PADRE;
y,
·
Segundo, él tuvo una clara comprensión de
su auto identidad.
La Palabra de Dios es
mucho más que “un libro de reglas” que debemos seguir y cumplir, especialmente
en esta Era de Gracia. Antes del día de Pentecostés, los hombres solo tenían
disponible ser seres de cuerpo y alma, solo unos pocos tuvieron una conexión
espiritual con Dios, así que el camino de acceso el Padre estaba prácticamente
cerrado. Unos cuantos hombres y mujeres fueron bendecidos por Dios con un
espíritu dentro de ellos que les comunicaba con el Dios vivo, tuvieron un
espíritu condicionado que conservaban de acuerdo a su fidelidad y obediencia.
Hoy vivimos en una
Administración privilegiada en la que cualquier hombre o mujer que confiesa
Romanos 10:9 y 10, recibe el espíritu santo de Dios como simiente incorruptible
(1ª Pedro 1:23). Ese espíritu nos da conexión directa con Dios, y la
posibilidad de hablar con Dios y de que Dios hable directamente con nosotros.
Jesucristo es El Camino, La verdad y La Vida que nos lleva al Padre. Con ese
espíritu santo, la unción del Santo, tenemos no solamente disponible CONOCER Y
ENTENDER LAS ESCRITURAS, SINO TAMBIÉN CONOCER Y ENTENDER EL CORAZÓN DEL DIOS
TODOPODEROSO PLASMADO EN ELLAS, Y SUS ALTÍSIMOS CAMINOS Y PENSAMIENTOS.
Nuestro Señor Jesucristo
comprendió en las Sagradas Escrituras, Quién es DIOS y cómo trabaja, y así, se
le abrió un amplio y profundo panorama del Dios vivo y verdadero Creador de los
cielos y la tierra, y un amplio entendimiento de su auto-identidad. Estas
verdades fueron fundamentales en su exitoso ministerio, y estas mismas
realidades son fundamentales en nuestro caminar exitoso con el Padre celestial
hoy día.
Miremos de cerca un
hermoso relato de nuestro Salvador que muestra la forma en que él comprendió
las Sagradas Escrituras y el corazón de Dios en ellas:
Mateo 12:1 En aquel tiempo iba Jesús por los
sembrados en un día de reposo; y sus discípulos tuvieron hambre, y comenzaron a
arrancar espigas y a comer.
2 Viéndolo los fariseos, le dijeron: He aquí tus
discípulos hacen lo que no es lícito hacer en el día de reposo.
3 Pero él les dijo: ¿No habéis leído lo que hizo
David, cuando él y los que con él estaban tuvieron hambre;
4 cómo entró en la casa de Dios, y comió los panes
de la proposición, que no les era lícito comer ni a él ni a los que con él
estaban, sino solamente a los sacerdotes?
5 ¿O no habéis leído en la ley, cómo en el día de
reposo los sacerdotes en el templo profanan el día de reposo, y son sin culpa?
6 Pues os digo que uno mayor que el templo está
aquí.
7 Y si supieseis qué significa: Misericordia quiero,
y no sacrificio, no condenaríais a los inocentes;
8 porque el Hijo del Hombre es Señor del día de
reposo.
En la Ley de Moisés estaba
estipulado que solo a los sacerdotes se les permitía comer estos panes de la
proposición. Pero David, en medio de una persecución encarnizada en la que
peligraba su vida y la de los hombres que le acompañaban, entró al templo e
incluso mintiendo obtuvo estos panes de manos del sacerdote Ahimelec (1ª Samuel
21). ¿Por qué hizo esto David, un “varón conforme al corazón de Dios”? Y
¿Por qué Jesucristo lo pone como ejemplo para lo que significa “misericordia
quiero, y no sacrificio”
David se vio obligado por
absoluta necesidad de entrar a la Casa de Dios y obtener estos panes del
sacerdote. ¿Por qué Jesucristo menciona este relato? Aquí está involucrada una
verdad absolutamente maravillosa: DIOS NO MIRA LO QUE MIRA EL HOMBRE; PUES EL
HOMBRE MIRA LO QUE ESTÁ DELANTE DE SUS OJOS, PERO JEHOVÁ MIRA EL CORAZÓN (1ª
Samuel 16:7b). Para Dios lo más importante en el hombre o mujer es LO QUE ESTÁ
EN SU CORAZÓN, en lo más profundo de su ser. Dios no está interesado en
rituales externos y en que se cumplan rigurosamente, no está interesado en las
apariencias, en cómo lucimos o lo que hablamos delante de los demás. ¡No! ¡Dios
está interesado y mira la más profunda intimidad de nuestro corazón!!!!!!!
Hay tres secciones en la
Palabra de Dios donde se encuentra esta frase “Misericordia quiero, y
no sacrificio”. Jesucristo estaba haciendo referencia a Oseas 6:6 que
dice:
Porque misericordia quiero, y no sacrificio, y
conocimiento de Dios más que holocaustos.
El libro de Oseas
está escrito en el contexto de una reprensión y advertencia a Israel justo
antes de aquella espantosa deportación a Babilonia. Dios deseaba que la
misericordia y el amor prevalecieran más que los rituales externos, y deseaba más que le conocieran a Él, que
los holocaustos. Él mismo había ordenado estos rituales y holocaustos, pero lo
que Él más amaba, y ama, es EL CORAZÓN IMPLICITO EN ELLOS.
David, el dulce cantor de
Israel, agradó a Dios por su corazón humilde, manso y sencillo, por su corazón
deseoso de conocerle y de hacer Su voluntad por encima de la Suya propia. En el
corazón de David había el profundo anhelo de conocer a Dios, de honrarle y
alabarle con sus pensamientos más profundos y con sus acciones. David se
equivocó seriamente en su vida algunas veces, la Palabra da testimonio de ello,
pero Dios le llama “un varón conforme a Mi corazón”, porque a Dios le agradaba
lo que él guardaba en lo más profundo de su ser, cuando nadie, solo él y Dios
estaban juntos.
Dios tuvo misericordia de
David cuando se vio obligado a entrar en el templo, a pedir aquellos panes e
incluso a mentir. David tenía una tremenda necesidad de sobrevivir a una
persecución totalmente injusta. Los discípulos en el día de reposo comenzaron a
espigar para comer por necesidad. Más grande que cualquier estatuto u
ordenanza, es el amor, la justicia y la misericordia de Dios, esto lo
comprendió perfectamente nuestro Señor Jesucristo.
Mateo 12:9 Pasando de allí, vino a la sinagoga de
ellos.
10 Y he aquí había allí uno que tenía seca una mano;
y preguntaron a Jesús, para poder acusarle: ¿Es lícito sanar en el día de
reposo?
11 El les dijo: ¿Qué hombre habrá de vosotros, que
tenga una oveja, y si ésta cayere en un hoyo en día de reposo, no le eche mano,
y la levante?
12 Pues ¿cuánto más vale un hombre que una oveja?
Por consiguiente, es lícito hacer el bien en los días de reposo.
Exteriormente y
humanamente podemos juzgar ciertas acciones como “buenas” o “malas” conforme a
nuestro criterio y los cinco sentidos, pero solo Dios Todopoderoso sabe lo que
hay implícito en cada acción de cada hijo Suyo, Él es Quien pesa los corazones.
Proverbios 17:9 Engañoso es el corazón más que todas
las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá?
10 Yo Jehová, que escudriño la mente, que pruebo el
corazón, para dar a cada uno según su camino, según el fruto de sus obras.
Proverbios 21:2 Todo camino del hombre es recto en
su propia opinión; pero Jehová pesa los corazones.
Nuestro Señor Jesucristo
entendió y discernió perfectamente entre lo externo y lo profundo, entre lo que
Dios mira y le da valor, y entre lo que el hombre valora
superficialmente.
Lucas 16:14 Y oían también todas estas cosas los
fariseos, que eran avaros, y se burlaban de él.
15 Entonces les dijo: Vosotros sois los que os
justificáis a vosotros mismos delante de los hombres; MAS DIOS CONOCE VUESTROS
CORAZONES; PORQUE LO QUE LOS HOMBRES TIENEN POR SUBLIME, DELANTE DE DIOS ES
ABOMINACIÓN.
¡Impactante declaración
para meditar! Y veamos ahora las serias acusaciones que nuestro Señor
Jesucristo lanzó sobre los líderes religiosos de su época, ¡gente que se supone
representaba a Dios!
Lucas 11:39 Pero el Señor le dijo: Ahora bien,
vosotros los fariseos limpiáis lo de fuera del vaso y del plato, pero por
dentro estáis llenos de rapacidad y de maldad.
40 Necios, ¿el que hizo lo de fuera, no hizo también
lo de adentro?
41 Pero dad limosna de lo que tenéis, y entonces
todo os será limpio.
42 Mas !!ay de vosotros, fariseos! que diezmáis la
menta, y la ruda, y toda hortaliza, y pasáis por alto la justicia y el amor de
Dios. Esto os era necesario hacer, sin dejar aquello.
43 !!Ay de vosotros, fariseos! que amáis las
primeras sillas en las sinagogas, y las salutaciones en las plazas.
44 !!Ay de vosotros, escribas y fariseos,
hipócritas! que sois como sepulcros que no se ven, y los hombres que andan
encima no lo saben.
Mateo 23:27¡Ay de vosotros, escribas y fariseos,
hipócritas! porque sois semejantes a sepulcros blanqueados, que por fuera, a la
verdad, se muestran hermosos, mas por dentro están llenos de huesos de muertos
y de toda inmundicia.
28 Así también vosotros por fuera, a la verdad, os
mostráis justos a los hombres, pero por dentro estáis llenos de hipocresía e
iniquidad.
Conforme a la ley, si un
judío tenía contacto con un muerto quedaba contaminado para realizar ciertos
ritos, celebrar fiestas y sacrificios. Jesús les dijo a estos religiosos que
ellos contaminaban a otros hombres, y ellos ni siquiera lo sabían.
Juan 5:42 Mas yo os conozco, que no tenéis amor de
Dios en vosotros.
Jesucristo dijo que
conocía que no había amor de Dios en esta gente religiosa que ponderaban lo de
afuera, cumpliendo ritos y mandatos y tradiciones por encima del amor de Dios y
la justicia. El Hijo de Dios, aprendió de su Padre que la justicia y el amor de
Dios están por encima de cualquier estatuto u ordenanza. El amor jamás hace mal
al prójimo y redime, rescata nuestras vidas de los más profundos pozos de
desesperación.
Teniendo siempre como
estandarte en lo más profundo del corazón el Primer y Segundo mandamiento, todo
lo demás cae en Su debido orden.
Hebreos 4:12 Porque la Palabra de Dios es viva y
eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el
alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos
y las intenciones del corazón.
13 Y no hay cosa creada que no sea manifiesta en su
presencia; ANTES BIEN TODAS LAS COSAS ESTÁN DESNUDAS Y ABIERTAS A LOS OJOS DE
AQUEL A QUIEN TENEMOS QUE DAR CUENTA.
Para quien ama a Dios con
corazón limpio, estas verdades simplemente son maravillosas y brillan como un
tesoro para su corazón. El hombre puede engañar al hombre con sus acciones
externas, pero Quien pesa y conoce los corazones ES DIOS MISMO.
La otra ocasión en que
Jesucristo hizo mención a esta cita de Oseas 6:6 está en Mateo:
Mateo 9:10 Y aconteció que estando él sentado a la
mesa en la casa, he aquí que muchos publicanos y pecadores, que habían venido,
se sentaron juntamente a la mesa con Jesús y sus discípulos.
11 Cuando vieron esto los fariseos, dijeron a los
discípulos: ¿Porqué come vuestro Maestro con los publicanos y pecadores? [gente repudiada por ellos]
12 Al oír esto Jesús, les dijo: Los sanos no tienen
necesidad de médico, sino los enfermos.
13 Id, pues, y aprended lo que significa:
Misericordia quiero, y no sacrificio. Porque no he venido a llamar a justos,
sino a pecadores, al arrepentimiento.
¡Jesús tuvo comunión y se
extendió a la gente más necesitada de liberación! Él no estaba interesado en
las apariencias externas, sino en cumplir la voluntad de Dios con el amor y
compasión que él conocía de su Padre. Nuestro Señor Jesucristo, a diferencia de
los líderes religiosos de su época, fue un hombre completamente coherente entre
sus palabras y sus acciones.
El relato de la mujer adúltera
registrado en Juan 8, habla de cómo esta mujer fue traída a nuestro Salvador
buscando poder acusarle. El procedió con sabiduría y prudencia, pero sobre todo
con mucho amor y compasión. Él conocía lo que la Ley de Moisés decía, pero él
sabía dividir y aplicar la Palabra de Dios CONFORME AL CORAZÓN DEL PADRE. A
aquellos religiosos les importaba muy poco la vida de aquella mujer, y para ser
honestos les importaba poco si se cumplía la Ley o no, ellos solo querían
comprometer a Jesús. A esta gente religiosa, que se supone representaba a Dios,
no les importaban los leprosos, los publicanos, las mujeres de mala reputación,
la gente que sufría, dolida del alma y del cuerpo, y lamentablemente ocurre muy
a menudo lo mismo hoy día entre aquellos que dicen representar a Dios. Pero a
Dios sí le interesa extenderse a todos ellos, y a la Palabra encarnada, a
nuestro Señor Jesucristo, al reflejo de nuestro Dios en esta tierra (Hebreos
1:3), también le interesa.
Dios es un Padre bueno y
compasivo que anhela revelarse a los Suyos en Su Palabra. En ella, Él muestra
innumerables veces Su misericordia y gran bondad y lo que Él desea de nosotros.
Recomiendo ampliamente leer el artículo “Oseas: La historia de la
misericordia redentora de Dios”. Al profeta Oseas se le dio la misión de
advertir al pueblo de Dios la destrucción que venía en camino debido a su
idolatría, desobediencia y rebeldía. Dios le pidió a Oseas que se casara con
una mujer que de antemano le advirtió lo engañaría. Esta mujer abandonó a
Oseas, para ir tras otro hombre, y después tras otro, y después tras otro hasta
que cayó en la esclavitud. Oseas ayudó a su mujer aun cuando ella estaba con
otros hombres, y cuando ella finamente cayó esclava, Dios lo envió a redimirla.
Dios le dijo que esta historia representaba la historia de Israel, una esposa
infiel, rebelde y torpe que por su necedad caía en la desgracia y que sería
redimida por la bondad de Dios.
El punto a meditar amados
hermanos y hermanas, no es si conocemos las Escrituras. Los fariseos y escribas
conocían las Escrituras y creían entenderlas. El punto es si conocemos y
entendemos al Autor de ellas y Su corazón, y si comprendemos Su voluntad para
aplicarla en nuestras vidas. ¡Ojalá nuestro corazón latiera solamente al ritmo
del corazón de nuestro Padre! Nuestra
vida como creyentes no se trata de apariencias, sino de lo que somos en la más
profunda intimidad, ahí donde solo nos encontramos Dios y nosotros a
solas.
Juan 17:3 Y esta es la vida eterna: QUE TE CONOZCAN
A TI, EL ÚNICO DIOS VERDADERO, Y A JESUCRISTO, A QUIEN HAS ENVIADO.
Proverbios 23:26 Dame, hijo mío, tu corazón, Y miren
tus ojos por mis caminos.
Proverbios 23:15 Hijo mío, si tu corazón fuere
sabio, también a mí se me alegrará el corazón;
16 Mis entrañas también se alegrarán cuando tus
labios hablaren cosas rectas.
Lucas 6:45 El hombre bueno, del buen tesoro de su
corazón saca lo bueno; y el hombre malo, del mal tesoro de su corazón saca lo
malo; porque de la abundancia del corazón habla la boca.
Hay un relato que me
llama poderosamente la atención porque, aunque no está escrito para la
Administración de Gracia, si podemos aprender de él y meditar profundamente en
lo que Dios quiere y le agrada:
Mateo 7:21 No todo el que me dice: Señor, Señor,
entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que
está en los cielos.
22 Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no
profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu
nombre hicimos muchos milagros?
23 Y entonces les declararé: Nunca os conocí;
apartaos de mí, hacedores de maldad.
Dios, nuestro Padre no está
interesado en cómo lucimos exteriormente, incluso en las cosas que hacemos
delante de los demás. Si no que está interesado en EL CORAZÓN implícito en todo
ello, si no está el corazón correcto, no somos más que metal que resuena o
címbalo que retiñe.
1 Corintios 13:1-7 De la Versión “The Message”
1 Si hablo con elocuencia humana y éxtasis
angelical, pero no lo hago con amor, no soy más que el crujido de una puerta
oxidada. 2 Si yo hablo la Palabra de Dios con poder, revelando todos sus
misterios y poniendo todo en claro como el día, y si tengo la fe para decirle a
una montaña: "Salta", y esta salta, pero no lo hago con amor, no soy
nada. 3-7 Si doy todo lo que poseo a los pobres e incluso voy a la hoguera para
ser quemado como un mártir, pero no lo hago con amor, no he logrado nada. Así
que, no importa lo que diga, lo que crea y lo que haga, estoy perdido, en
bancarrota, arruinado sin el amor.
Dios NO MIRA LO QUE MIRA
EL HOMBRE. LO MÁS IMPORTANTE EN LA VIDA DE UN CREYENTE QUE HONESTAMENTE QUIERE
HACER LA VOLUNTAD DE DIOS, ES SU RELACIÓN INTIMA, VITAL Y PESONAL CON Él, ¡de
ahí parte su vida entera! ¡De ahí parte la verdadera vida en abundancia! ¡De
ahí parten los verdaderos frutos por los que seremos conocidos y con los cuales
seremos cartas vivientes y testimonios verdaderos de Cristo en esta tierra!
Efesios 5:1 Sed, pues, imitadores de Dios como hijos
amados.
2 Y andad en amor, como también Cristo nos amó, y se
entregó a sí mismo por nosotros, ofrenda y sacrificio a Dios en olor fragante.
14 Por lo cual dice:
Despiértate, tú que duermes,
Y levántate de los muertos,
Y te alumbrará Cristo.
15 Mirad, pues, con diligencia cómo andéis, no como
necios sino como sabios,
16 aprovechando bien el tiempo, porque los días son
malos.
17 Por tanto, no seáis insensatos, sino entendidos
de cuál sea la voluntad del Señor.
Cuando no solo escuchamos
de Dios a través de otros, sino que realmente conocemos a Dios Cara a cara en
una relación íntima y personal con Él, (lo cual está absolutamente disponible a
través de los logros de nuestro Señor y Salvador Jesucristo), ¡sabremos qué le
agrada a Dios y cómo quiere ser servido, sabremos cómo funcionan las cosas de
Su Reino y entenderemos quienes hemos sido hechos en Cristo y lo que estamos
llamados a ser en esta tierra! Sabremos que ante Él no hay careta que valga,
sino que todas las cosas están desnudas y abiertas delante de Él. Al conocerle
por experiencia propia, en vez de temerle, como la religión nos infunde a
hacer, le amaremos más cada día y desearemos más cada día estar cerca de Él y
hacer Su preciosa voluntad.
Si lo necesitas, ¡pide
entendimiento y se te dará!
Mateo 7:7 Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis;
llamad, y se os abrirá.
8 Porque todo aquel que pide, recibe; y el que
busca, halla; y al que llama, se le abrirá.
9 ¿Qué hombre hay de vosotros, que si su hijo le
pide pan, le dará una piedra?
10 ¿O si le pide un pescado, le dará una
serpiente?
11 Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas
dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre que está en los cielos dará
buenas cosas a los que le pidan?
Salmo de David, un varón
conforma al corazón de Dios:
Salmos 139:1 Oh Jehová, tú me has examinado y
conocido.
2 Tú has conocido mi sentarme y mi levantarme;
Has entendido desde lejos mis pensamientos.
3 Has escudriñado mi andar y mi reposo,
Y todos mis caminos te son conocidos.
4 Pues aún no está la palabra en mi lengua,
Y he aquí, oh Jehová, tú la sabes toda.
5 Detrás y delante me rodeaste,
Y sobre mí pusiste tu mano.
6 Tal conocimiento es demasiado maravilloso para mí;
Alto es, no lo puedo comprender.
7 ¿A dónde me iré de tu Espíritu?
¿Y a dónde huiré de tu presencia?
8 Si subiere a los cielos, allí estás tú;
Y si en el Seol hiciere mi estrado, he aquí, allí tú
estás.
9 Si tomare las alas del alba
Y habitare en el extremo del mar,
10 Aun allí me guiará tu mano,
Y me asirá tu diestra.
11 Si dijere: Ciertamente las tinieblas me
encubrirán;
Aun la noche resplandecerá alrededor de mí.
12 Aun las tinieblas no encubren de ti,
Y la noche resplandece como el día;
Lo mismo te son las tinieblas que la luz.
13 Porque tú formaste mis entrañas;
Tú me hiciste en el vientre de mi madre.
14 Te alabaré; porque formidables, maravillosas son
tus obras;
Estoy maravillado,
Y mi alma lo sabe muy bien.
15 No fue encubierto de ti mi cuerpo,
Bien que en oculto fui formado,
Y entretejido en lo más profundo de la tierra.
16 Mi embrión vieron tus ojos,
Y en tu libro estaban escritas todas aquellas cosas
Que fueron luego formadas,
Sin faltar una de ellas.
17 !!Cuán preciosos me son, oh Dios, tus
pensamientos!
!!Cuán grande es la suma de ellos!
18 Si los enumero, se multiplican más que la arena;
Despierto, y aún estoy contigo.
23 Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón;
Pruébame y conoce mis pensamientos;
24 Y ve si hay en mí camino de perversidad,
Y guíame en el camino eterno.
Salmos 143:10: Enséñame a hacer tu voluntad, porque
tú eres mi Dios; Tu buen espíritu me guíe a tierra de rectitud.
¡DIOS TE BENDIGA!
Con amor en Cristo,
Claudia Juárez Garbalena
“Oseas: La historia de la
misericordia redentora de Dios”:
Contacto:mirasoloadios@live.com
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