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Jesús llevó una corona de espinas por ti. De Joseph Prince



Juan 19:2 Y los soldados entretejieron una corona de espinas, y la pusieron sobre su cabeza…

Si el trabajo duro fuera la fórmula para la prosperidad, entonces todos los que trabajan duro deberían ser prósperos. Pero este no es el caso. ¡Muchas personas que trabajan muy duro todavía están en carencia!

No estoy defendiendo la pereza. Lo que estoy diciendo es que trabajar duro con el sudor de tu frente no es la forma en que llega la provisión de Dios. De hecho, si tienes que trabajar horas extras todo el tiempo y estás estresado, probablemente estás operando bajo la maldición.

¿Qué maldición es esa? Es esta: "Con el sudor de tu rostro comerás el pan ..." (Génesis 3:19). Y esto se refiere al estrés, la lucha y las ansiedades que vienen con el trabajo duro y, que aun así, produce poco. Ahora, el trabajo en sí no es una maldición, ya que Dios le dio a Adán trabajo antes de la caída: Adán cuidaba el jardín del Edén. Fue sólo después de haber pecado que la tierra fue maldecida y produjo espinas, y el hombre tuvo que trabajar y esforzarse duramente para comer de ella (Génesis 3: 17-18).

Pero alabado sea Dios, Jesús llevó las espinas en su cabeza para mostrarte que él ha cargado esta maldición por ti y te redimió de ella. Él llevó esa corona de espinas para que tú puedas trabajar libre de estrés y aun así tener resultados. Tú no tienes que estar preocupado y estresado día y noche como la gente del mundo para progresar en la vida. Tu Padre celestial puede llevarte allí sin preocupaciones ni estrés (Mateo 6: 31-33).

Amado, cada maldición que debía caer sobre tu cabeza, tipificada por la corona de espinas, cayó sobre la cabeza de Jesús. Él usó la corona de espinas para que tú puedas tener paz en tu mente. Él usó la corona de espinas por ti y tomó tu maldición para que puedas usar la corona de gloria y tomar su justicia, y todos los beneficios de esa justicia.

Hoy, no trabajes y te esfuerces duramente como los pueblos del mundo. En su lugar, ¡ten expectativa de ver las bendiciones de Dios entrar en tu vida sin sangre, sudor y lágrimas porque Jesús llevó la corona de espinas por ti!

Mateo 6:31 No os afanéis, pues, diciendo: ¿Qué comeremos, o qué beberemos, o qué vestiremos?

6:32 Porque los gentiles buscan todas estas cosas; pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas.

6:33 Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.

6:34 Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal.

Extraído del sitio “Joseph Prince Ministries”



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