Cultiva tus dones con la sabiduría de Dios. Devocional. De Joseph Prince

Proverbios 17:8 [KJV] Un don es como una piedra preciosa a los ojos de quien la tiene; dondequiera que vaya, prosperará.

Cuando vemos algo mohoso, lo desechamos. Pero cuando Alexander Fleming vio sus placas de cultivo contaminadas con moho, descubrió la penicilina. Verás, él tenía un don que le prosperó.

José, un esclavo hebreo en Egipto, no tenía nada excepto su don de interpretar sueños. Pero mira lo que ese regalo hizo por él. Lo prosperó. Interpretó el sueño de Faraón y se convirtió en el hombre más poderoso de Egipto después de Faraón (ver Génesis 41).

"Pero Pastor Prince, ¿qué pasa si no tengo ningún don?"

Amigo mío, no dejes que nadie te diga que no tienes ningún don. Dios le ha dado a cada persona un don que le puede abrir puertas de oportunidades y traer grandes bendiciones.

Tal vez no estas consciente de ese don que tienes dentro de ti, o tal vez no le has sacado provecho hasta este momento ya que no has encontrado la mejor manera de usarlo. Necesitas tomar tu don y pedirle a Dios sabiduría para cultivarlo hasta que se convierta en una herramienta tan poderosa o "piedra preciosa" que dondequiera que vayas, prosperes.

Este fue el caso de un hermano de la iglesia que fue tremendamente dotado en las artes creativas. Durante mucho tiempo, le faltó la confianza y el denuedo para abandonar la seguridad de su trabajo como policía y tomar su propio camino. Pero cuando comenzó a buscar la sabiduría de Dios para su situación, Dios le dio el denuedo para dejar su trabajo y volver a la escuela para dedicarse a las artes creativas. En la escuela, él prosperó, se convirtió en uno de sus mejores alumnos e impresionó tanto al director con su don creativo que le ofrecieron un puesto de profesor en la escuela incluso antes de graduarse.

Ahora, por favor, no vayas y renuncies a tu trabajo después de leer esto. Lo que debes hacer es pedirle a Dios sabiduría sobre tu don. Porque cuando la sabiduría de Dios es añadida a tu don, ese don se convierte en “una piedra preciosa a los ojos de quien la tiene; dondequiera que vaya, prosperará”.

Extraído del sitio Joseph Prince Ministries:

https://www.josephprince.org/