Donaciones
Fuera de México:

Check out with PayPal

Más Saludable Más Fuerte Cada Día. De Joseph Prince


Hechos 2:46 Y perseverando unánimes cada día en el templo, y partiendo el pan en las casas, comían juntos con alegría y sencillez de corazón.

Ellos coincidían en el templo y partían el pan en las casas y comían juntos con alegría y sencillez de corazón. Si regresamos a la iglesia del primer siglo los cristianos se reunían cada día como corporación en el templo o de casa en casa en grupos pequeños. Y cuando se reunían en sus casas, la Biblia nos dice que ellos partían el pan, esto es la Santa Comunión, y ellos lo hacían cada día.

Ahora, no estoy diciendo que debes tomar la comunión cada día. Pero si te sientes guiado y quieres hacerlo, adelante. El punto de tomar la Santa Comunión diariamente es este: Si estás enfermo, podrás ser sanado gradualmente. Esto significa que llegarás a estar mejor y más fuerte día tras día; primero al treinta por ciento, después al sesenta por ciento y por último al cien por ciento.

Veras, mientras puedes recibir sanidad a través de una oración de fe (Marcos 11:24), esto algunas veces esto pone presión en ti porque eso requiere que recibas totalmente y de una vez completa sanidad en el momento que oras. No hay nada malo con la oración de fe, pero te encontraras diciendo: “Debo creer para recibir todo ahora, debo creer para tenerlo todo ahora”.

Marcos 11:24 Por tanto, os digo que todo lo que pidiereis orando, creed que lo recibiréis, y os vendrá.

Pero la Santa Comunión te permite recibir una medida o un poco de tu sanidad cada vez que participas en fe, así tu consigues estar mejor y mejor. Lo más que la tomas, lo mejor que tú llegas a estar. No hay presión en creer que tienes que recibir todo de una vez.

¿No es bueno Dios? Él trabaja contigo, se encuentra contigo en tu nivel de fe.

Ahora, hay casos qué he conocido en nuestra iglesia, en mi familia y en mi propia vida cuando la manifestación de sanidad es inmediata y completa, y si sucede de esta manera, alabado sea Dios. Pero si no, no te preocupes. Lo más que participes de la Comunión, lo mejor que vas a estar.


Yo sé de gente que toma la Santa Comunión tres veces al día, de la misma manera como toman medicina. ¿Por qué no? Amigo mío, si estás muy enfermo y eres diligente tomando tu medicamento tres veces al día, ¿por qué no darle a la Cena del Señor la misma calidad de atención? Por qué no exaltar esto y la próxima vez que participes del pan y tomes de la copa, quizá encontraras que tu enfermedad se ha ido por completo.

Extraído del sitio “Joseph Prince Ministries”

Comentarios