CARTA A LA HERMANA IGLESIA - Por Juan Luis Molina

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Subject: FW: Cartas a la hermana Iglesia

Date: Sat, 21 Jan 2012  

CARTAS DE LA CABEZA…

A la hermana iglesia 

  

Si el SEÑOR no edifica la CASA en vano se esfuerzan SUS edificadores

PRIMERA CARTA

TU NUEVA CIUDADANÍA

 Amadísima hermana !hay tantas cosas que querría compartir contigo! El Padre me inspira a ponértelo todo en el papel, pero no es fácil, porque se me amontonan las ideas. Es que todo lo que nos da a ver el Padre, a través del Cristo que somos ahora, se hace mucho más grande cada día. La Hermosura del Padre que vemos en Cristo es demasiado brillante, por eso nuestras palabras no la pueden expresar del todo. Se necesita que Dios se la muestre a cada uno de Sus hijos. El consuelo cuando no nos salen las palabras necesarias, reside en saber que, todos Sus hijos comen de Su misma miel. El Padre es Quien directamente cuida de darles de comer de Su Miel a cada uno de Sus hijos. A cada uno nos ha llamado por nuestro nombre y nos trata nuestro Abba Padre muy especialmente. La eternidad del Amor Primero, que es Dios, se nos ha rociado en nosotros, Su espíritu de Cristo en nosotros, esos ríos de aguan vivas de los que habló nuestro hermano mayor, se nos han vertido con tanta abundancia, como si fuéramos el único y no hubiera otros. Parece como si solo para ti se derramase del todo la sabiduría y ternura del Abba Padre.  Es un consuelo amada mía saber que NO es nuestro cometido darle de beber Su miel a nadie, sino que Dios sabe muy bien darle todo lo necesario a Su hijo, Él solo Se basta para eso. ¡Y qué nutritiva es la miel del cielo!  Con la miel que comió Jonatán del panal que le puso Dios en el camino, se le aclararon sus ojos (1a Samuel 14:25-27). Recobró nuevas fuerzas en medio de la debilidad.

"...y todo el pueblo llegó a un bosque, donde había miel en la superficie del campo. Entró, pues, el pueblo en el bosque, y he aquí que la miel corría; pero no hubo quien hiciera llegar su mano a su boca, porque el pueblo temió el juramento. Pero Jonatán no había oído cuando su padre había juramentado al pueblo, y alargó la punta de su vara que traía en su mano, y la mojó en un panal de miel, y llevó su mano a su boca...y fueron aclarados sus ojos.

  La pregunta del versículo 30 de este mismo capítulo, aún es actual y se puede aplicar hoy mismo. Jonatán, que tipifica a Cristo, después de alargar la vara que lleva en su mano, la autoridad de su espíritu, da el ejemplo y el primer paso, para que ahora sus miembros coman de Su Misma miel - de la dulce miel del Padre directamente: Ved ahora cómo han sido ahora aclarados mis ojos, por haber gustado un poco de esta miel.  ¿Cuánto más si el pueblo hubiera comido libremente hoy del botín tomado a sus enemigos?

 Esta pregunta es tremenda. Actual y transcendental. La pregunta debe hermana mía aplicarse de alguna manera en Cristo. Podríamos aplicar esta pregunta a Cristo, de la siguiente manera:  ¿Que es lo que sucederá cuando cada miembro en este cuerpo alargue su vara, y coma directamente de la Miel, y por añadidura también, del botín que recogió Cristo para nosotros, de manos del enemigo de Dios? - y lo que sucederá, sin duda alguna, lo que esperamos y nos dice Dios, es que se aclaren del todo nuestros ojos, y recobraremos nuevas fuerzas. Si Dios te está revistiendo de Su Nuevo Plumaje, que e Cristo en ti, tú ya alargaste la vara divina, que te conecta con esta dulzura. La fuerza de Cristo se hace tuya ahora.   El Panal de Dios es Cristo, y Su Miel se ha puesto en el camino, para que coma Su pueblo y recobre también sus fuerzas. Nosotros somos mucho más que Su Pueblo, nosotros somos Sus hijos muy amados. Dios te ha puesto a Cristo dentro: otros lo han tipificado, otros te hablaron de Su Gloria, pero nada se puede comparar a lo que te enseñó Dios a ti sola. El panal de rica miel que ha destilado la boca de Dios con Su Palabra, manifiesta y está embebido por todas partes de Su Miel Cristo. La misma dulzura celestial tienes tú desde que comiste directamente de la boca de Dios, cuando te vestiste de Sus tesoros por la fe sola. Ni más, ni por supuesto menos recibiste que la Cabeza. Cuando Dios aclaró tu entendimiento, y te mostró en un abrir y cerrar de ojos todo lo Suyo,  te hizo saber que tú ya eres ciudadana de plenos derechos, ahora, de Su nuevo Reino. Y el Reino que te ha concedido el Padre Todopoderoso reinar en tu Cristo es mucho más alto y magnífico de aquel que tú jamás supusiste o imaginaste. Mucho más grande. Lo que David vio en Tu Padre, con lo que se quedó boquiabierto, amada mía, fue con la misma visión celestial que Él Mismo Creador Abba Padre te mostró a ti: Le pediste y Él te mostró: Su Gloria. Y en Su Gloria, cuando por Su resplandor te envió Su mensaje, Él te hizo saber que tú, en particular, eres Su gema más hermosa: Una de las joyas que adornan el vestido del Rey de reyes y Señor de señores.

LO MÁS DIFÍCIL PARA EL HOMBRE ES ACEPTAR QUE ES SU OBRA PRIMA - LA OBRA PRIMA DE DIOS POR SU SOLA GRACIA

Así como veo reluciente el vestido de tu Cristo, cuando te diste por ciega y Dios te abrió tus ojos, así veremos que acabará todo. Claro que no todo ha doblado aun sus rodillas ante esa promesa venidera. Yo sigo viendo a muchos que no se han quedado satisfechos con la medida que les ha otorgado Dios de Cristo, todavía sigo escuchando que hay que acrecentar-le algo, a Su medida. Como no se fían de que ya venga completa Su medida, se proponen y resuelven ellos a incrementarle lo que sea, cosas tales como disciplinas y esfuerzos en la carne, sacrificios para moldear sus cuerpos. Para ser buenos y adecuados "recipientes." Pero Dios nos dice a todos que lo creamos simplemente, que nos dio la vida –una Nueva Vida, cuando aun éramos pecadores. Ahora jamás nos ha pedido que modifiquemos, lo que jamás podrá ser modificado. Ya lo sepultó DEL TODO nuestro Abba Padre, en la misma cruz que colgó del Calvario nuestro Salvador, hace ahora más o menos unos dos mil años. Lo que Dios nos dice a todos es que lo creamos, que aguardemos pacientemente Su promesa hasta Su concretización. Sus promesas tienen por albo a Cristo. Cada uno de Sus pétalos está repleto de Su sabia. Mientras se va deshaciendo en el polvo la vieja creación, la nueva no obstante se va renovando cada día. Cada día es mayor su expansión. En nosotros cada uno y también en todo el mundo. Eso es lo que escuchamos todos. Por eso, generalmente,  no cosechan nada de bueno los que golpean su cuerpo intentando moldear su carne y producir frutos espirituales, queriéndolo poner por servidumbre; porque no ponen la vista en lo alto. Pero el barro tiene que ser moldeado por las manos del Alfarero, no puede ser de otro modo, si queremos producir frutos espirituales. Si alguien quiere moldarse a sí mismo, por supuesto que se lo permite "todavía" el Padre; pero a los que se adueñen de lo mismo que él pretende, por la fe sola y sencilla de un niño, que es la fe del grano de mostaza, le nace en sí naturalmente Cristo cada día más formado, sin disciplinas ni esfuerzos de la carne innecesarios. 

Así que ahora eres un nuevo material en Cristo que se sobrepone al barro: Su obra prima es de oro y de plata y de piedras preciosas. De la arcilla quebrada sacó nuestro Abba Padre un nuevo vaso. En Sus manos, cuando un hijo Suyo se lo permite, lo convierte el Alfarero de “vaso de barro,” en “cristal de alabastro”. El recipiente adecuado y perfecto para contener el perfume de Dios. Su esencia es Cristo, y quien moldeó tu cuerpo fue Dios para contener Su perfume. Puedes intentar moldear tu cuerpo, si, pero no saldrá nunca tan perfecto como lo moldea el Padre.  

Quiero que recuerdes hermana mía la finalidad para lo que ha creado todo el Creador: Para Su alabanza y adoración. ¿Cuánta no será la gloria que recibirá Dios, el día que veamos a Sus hijos derramándose del todo para fuera, desde el interior de cada una de sus criaturas mismas hacia Dios!!? - Será maravilloso. Quiero que seas sabia y que conozcas que así acabará toda la obra, que solo Dios en ti comenzó. Tu eres un río de agua viva y en tu interior a puesto Dios un volcán. Hoy en día, tus hermanos ven y palpan Su Gloria, la bendita Gloria del Abba Padre por tu recipiente, y por miles de recipientes que se están derramando para fuera, porque Dios les ha descubierto, igual que a ti, en ellos mismos Sus propias fuentes. Se está haciendo la “Sunesis” de Dios Amada mía. Cuando tus hermanos reconocen tu Cristo, eso indica que se ha dado “la Sunesis” entre tu y ellos. Lo que ellos reconocen es la bendita y maravillosa Palabra de Dios en tu Cristo, lo que hace por tus manos Dios, y se los hace reconocer el Espíritu Santo. Es como varios ríos que se cruzan todos en un punto, y desde ahí corren juntos. Y además, se están juntando muchos más ríos. La corriente se está comenzando a notar más fuerte. Este Cristo que ahora somos, tiene una profundidad insondable y asombrosa, que hace que se multiplique todo a su paso: Todo a nuestro alrededor se viste de la Gloria de Dios cuando llevamos encendido Cristo en nosotros. Es simplemente ilimitado en expansión este Cristo que somos ahora. Dios habita en él, y la Gloria de Dios no la pueden contener los cielos de los cielos. Es demasiado grandiosa, por eso nuestro Abba Padre no se contenta con reinar en los cielos, y acabará reinando también aquí sobre la tierra a través de Su Rey de reyes y Señor de señores. 

     Todo lo Dios ha hecho para Él, para Él Mismo, ahora lo ha depositado en Su Cristo, del cual Cuerpo hacemos parte integrante. Esto es lo que significa que ´Dios lo sujetó todo bajo sus pies. Habrá un día que Cristo le devuelva el Reino a Su Padre, y será Dios todo en todos.

¿Cómo será, hermana mía,  realmente, el proyecto de Dios? ¿Cómo acabará lo que Él ha comenzado? Si habiendo ahora solo visto el bordecito de Su manto, ha levantado en nosotros tantas adoraciones y alabanzas al Altísimo, imagínate lo que a partir de ahora, que ya se ha formado más Cristo en nosotros, veremos sin lugar a dudas. ¿Cómo podría no ir engrandeciéndose la Gloria del Padre más y más en nosotros?  Por eso hermana mía, aunque hay muchos que nos difamen entre los hermanos por confesar esto, no es un disparate confesar que vemos cosas más transcendentales que las que vieron nuestros hermanos, los que duermen en Cristo. ¿Te das cuenta? Hay algo que el Abba Padre le muestra inmediatamente y sin falta al hombre y a la mujer que se entregan del todo en Sus manos: Son Sus obras transcendentales, y siempre nos caemos de espalda cuando se nos aparece el resultado de Su Todopoderosa Gloria. ¿Qué sucedió cuando tú y yo nos dimos por muertos, desfallecidos en Sus Manos tiernas y poderosas?  ¿No se nos apareció Cristo en el Camino? Como le sucedió a Pablo, como le ocurrió a Müller, y como le ocurre a todo miembro que se le manifiesta Dios en su vida, nos quedamos ciegos primero en nuestros entendimientos. Morimos primero en todos los sentidos. Porque nada es aquí como nosotros habíamos imaginado. Ni tan siquiera lo que nos enseñaron los santos hombres, le llega al calcañar, a las visiones y los sueños y las revelaciones que se nos han destapado en Cristo. Primero morimos en todos los sentidos; y, cuando nos vaciamos del todo, recobramos la vista de Cristo, y ya no andamos por la vista aquella perdida, sino que en los nuevos sentidos se nos abrió un paisaje indescriptible de belleza, como jamás vimos antes, por la fe sola. Era sencillamente imposible ver a Dios con aquellos ojos, ni pudieron verlo tan brillantemente los que se fueron a dormir en Cristo. Ni tan siquiera bastaba que nos contasen Su historia. Dios Se tuvo que dar a conocer a cada uno a Sí Mismo.

Cuando Dios nos puso dentro Su Punto de Vista, o Él Mismo directamente, o  a través de algún “Ananías” que nos enviase, entonces comenzamos a ver las cosas todas muy diferentes. Nos caemos de lado, y nos vaciamos de nosotros mismos cuando vemos el resplandor de Su Gloria, nos caemos del caballo; y no tarda mucho el espíritu de Dios en llenarnos nuevamente de vida, y esta vez, hace correr de nosotros un río de vida ilimitado. Una fuente ilimitada de aguas vivas que corre desde nuestro interior.  No tenemos que salir afuera a buscar el agua todos los días, como la Samaritana al pozo. Estas aguas espirituales son muy superiores al maná que a Israel le caía del cielo. Aquellos tenían que salir de sus tiendas para recogerlo, pero en nosotros se ha abierto un estanque de aguas quietas y tranquilas, que corre ilimitado desde nuestro interior. Acuérdate que en Su Jardín, en el principio no había lluvias, sino que un vapor salía del interior de la tierra que regaba todo Su Jardín. La Iglesia de Dios es un jardín lleno de flores nuevas y frescas, despidiendo su perfume hacia el cielo para perfumar a Dios. La Iglesia de Dios es un coro afinado a Sus oídos al Altísimo. Y de sus bocas salen las notas afinadas de Su coro de adoradores, para deleitar Sus oídos a Dios. Esta es la visión de Su verdadera Iglesia. 

UN FIN NECESARIO, PARA UN NUEVO PRINCIPIO

Preciosa gacela, cuando nos dimos por muertos y dejamos por la fe sola que Cristo principiase a vivir por nosotros, lo primero que se destapó de su fuente viva y nos mostró Dios, fueron las cualidades de nuestro material nuevo – Cristo en nosotros. Ahora sabemos que nuestro nuevo material, posee cualidades que lo hacen incorruptible. ¿Y qué significa esto?  La vida de Adán, que se volvió corruptible, fue "menguando" hasta su total extinción. Si esto es verdad, entonces, dice el espíritu de Dios que, de igual modo, si nuestro Cristo es incorruptible, eso significa que lleva consigo una eterna "expansión" de vida dentro de sí mismo.

Dios nos ha garantizado con pruebas y señales, que ahora somos igual de ilimitados que es Su Cristo Jesús, a la diestra del Padre. Si por la fe sola nos apoderamos de todo lo que contenga Cristo,  entonces estaremos conociendo los asuntos eternos e ilimitados del Padre, cosas que ojo humano no vio ni oído escuchó, ni “todavía” habían subido antes, hasta ahora, al corazón de hombre alguno. Lo que vemos ahora es fresco y es actual amada mía. Dios no se ha contentado con que oigamos Su Voz, sino solo por Su boca. Y antes de haberla escuchado directamente de Él, jamás habíamos oído nada igual, tan palpablemente verdadero. Es cierto que muchos nos habían contado como era nuestro Abba Padre, pero jamás vimos nada igual, hasta que se nos reveló Él a Sí Mismo. Dios no te creó para dirigirse a ti, a Su flor más perfumada en el jardín, a través de algún otro siervo Suyo, y si lo hizo al principio fue para que, con las palabras que le diese Él, te conectases tú a solas, solo con Él; pero desde que te fundiste con el Padre, nuestro Jardinero, ni mandó a nadie más a regar la flor de Su jardín, ni deja que nadie más que Él cuide de ella; pues es cierto que Él te ama tanto, que quiere personalmente ocuparse del todo de ti. No solo de una pequeña parte, o de tu ochenta por ciento, sino que del cien por cien de ti tiene muchos celos Tu Creador. Jamás te soltará de Sus manos poderosas. Todo te lo suplirá Él directamente, para que a tu Dios des tú la gloria solamente. Dios te hará cada vez más hermosa en Sus solos Brazos. Te moldeará y sacará de ti una criatura, como jamás te imaginaste. Sin necesidad de plantadores o regadores, al Jardinero Mor del universo Le encanta tratar personalmente de Sus propias flores ¿Cuánto más de ti?

Hoy vemos amada mía, cosas mucho más transcendentales de las que han visto todos los apóstoles y profetas, simplemente porque hoy está mucho más cerca la salvación que ellos anunciaron: Cristo. Hoy vemos cosas más grandes, porque en Cristo se nos muestra la verdadera Gloria del Padre, “actual” - se nos muestra Su Gloria actual - que es mucho más “grande” o evidente, y está mucho más próxima, que la que vieron todos los hombres antes. ¡Sí! Es cierto, lo que todos Sus santos hombres vieron con Su espíritu, es Su Misma Gloria, pero Su Gloria ahora es mucho más resplandeciente, de lo que haya visto jamás hombre alguno, anteriormente. Está más cerca, en proximidad de lugar y de tiempo. De las dos cosas. Aquellos miembros firmes a Cristo que se fueron a dormir, no podrían haber visto el verdadero brillo que vemos nosotros ahora ¿Por qué sucede así? simplemente: Porque nuestra salvación, la que ellos proclamaron y sostuvieron firmemente en Cristo, está ya más cerca que cuando creímos, o creyeron aquellos santos hombres. Y sobre todo, porque la Expansión de Dios en todo Su Orbe, siempre va en aumento apareciendo. Esta es una verdad eterna e inmutable. Desde el principio de la caída del hombre, se han ido cumpliendo Sus promesas, y con ellas la expansión de la Gloria de Dios. Nuestro Cristo solo tiene ojos para el cumplimiento de Sus Promesas, las que faltan por cumplir ten por seguro hermana mía que están a punto de reventar en todo Su Orbe, no faltaron las que se cumplieron y tampoco faltarán ahora estas. Hay promesas que están por suceder muy pronto, mucho más inmediatas en el tiempo y en el lugar, de lo que puede imaginarse el hombre. Están a la mano y son visibles en Cristo.  Su Gloria ya se palpa y se distingue muy transparentemente, y siempre que eso ocurre, siempre se desvanece y disipa la vanagloria del hombre. Por eso ya no nos contentamos con los que plantan ni con los que riegan, sino con nuestro Dios que es Quien nos da el real crecimiento. Que el mundo y los miembros hermanos dormidos no vean lo que Dios está haciendo de ti, jamás será un impedimento para que se cumpla, muy rápidamente, la visión que ahora tienes tu. No perder esa visión amada mía significa retener la fe. Significa no olvidarse de que posees por derecho de sangre el título de propiedad, que recibiste de manos de tu Abba Padre, el anillo y el sello con el cual reinarás mil años, en esos escenarios de la Tierra Prometida que se encuentra tan a la mano.

Hoy es mucho más transparente y visible Su Gloria de lo que la vieron todos los hombres santos que han existido hasta nosotros, y tanto da si fuesen ellos ministros para Israel, como si lo eran para le edificación de la Iglesia. Si es cierto que Su Palabra se cumple, entonces cada día que pasa es más brillante la explosión de Su Gloria. Los ministros de Dios que se fueron a dormir en Cristo, vieron estas cosas – nosotros vemos su cumplimiento. Claro que el cumplimiento, supera en todo a la visión, a la profecía. Cuando los pobres y los necios y los errantes de la tierra los haya escogido Dios, para avergonzar a los sabios, podremos decir que son los últimos tiempos de la Iglesia aquí, sobre la tierra. Yo estoy persuadido de que esto mismo tan transcendental es lo que está ocurriendo. El hecho de que Dios esté irguiendo a Cristo en India a través de creyentes que no precisan de seminarios ni de clases de la Biblia, sino de una manera inmediata por espíritu santo, es una amorosa bofetada de Dios para todo los creyentes occidentales, que poníamos nuestros ojos en los NOMBRES, y no en el NOMBRE Cristo Jesús. Los “últimos serán los primeros.” Cuando Dios haya elegido a estos últimos, a los más necios y a los más desprotegidos, para avergonzar a los sabios, podremos decir que serán los últimos tiempos de Su Iglesia. Claro que no te debes dejar mover fácilmente de tu manera de pensar, sobre este asunto espiritual, Tu Dios desde ahora te revelará a ti, personalmente, todas las cosas que Él está haciendo. Dios te actualizará y te pondrá al corriente de todo, en un abrir y cerrar de ojos; y nadie como tu espíritu santo está tan capacitado para fundirse con la voluntad del Padre, y ser parte integrante de lo que Él está haciendo, en este preciso instante. Todos los que están testificando en primera mano esta maravillosa Gloria del Padre, en India, en África, en Europa, y en todas partes del mundo de donde Dios los escoja, están escuchando Su misma Voz. Pero el Padre Se derrite dándotelo todo Él. Se embelesa Dios contigo. Todo lo que podemos escuchar de la boca de nuestros hermanos, no es más que la confirmación de Dios, de lo que Dios nos enseña nosotros primero.  ¿Cómo podría Él darte una palabra diferente, de la que le dé a Sus principescos hijos? Porque tú ya sabes que eres la niña de Sus ojos, Le has cautivado Su corazón. Te ama sobre todas las cosas, y la misma pasión por Él, por tu Gigante y Héroe, te ha cautivado a ti hacia Él. Vives plenamente dependiente de Dios, para ver cuál será Su próxima palabra. Así ama a cada uno de Sus hijos, y de esta manera los alimenta y edifica.

CONCLUSIÓN

Al mandamiento de Dios nadie le puede añadir o sustraer ni una jota ni una tilde, Su Plan está trazado y es inmutable: Aunque lo hayan visto los hombres, o les haya sido velado el Plan del Creador, eso jamás ha sido un obstáculo para que Dios siguiese expandiendo Su Gloria. Siempre ha sido excelentemente hermosa la Gloria de nuestro Abba Padre, y siempre ha ido en aumento el crecimiento de Su Gloria. En las flores de Su jardín; es decir, en Sus hijos más amados, dice nuestro Abba que Su Gloria ira irá siempre en aumento en nosotros, hasta que el día sea perfecto. Si nos conectamos a Cristo Jesús el resplandor de Su gloria, el brillo de la gloria que le ha otorgado Dios a él, es la misma que trasparece de nosotros. Cada día salen en nosotros más y más colores vivos y radiantes, porque Cristo es la túnica de piel de muchos colores que para José bordó Raquel. Tu Cristo es brillante como esa “nueva piel.” a medida que la “vanagloria” de todos los hombres va decreciendo, hasta que se derrita totalmente de nosotros el viejo hombre, se irán formando sus colores en esta maravillosa túnica provista solo por la Gracia del Abba Padre.  ¿Ves cuanta pureza habita en tu Cristo, y cuan perfecta eres?  Dios nos ha injertado en el Cedro del Líbano. 

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