JUAN 14. De la versión en inglés “The Message” (“El Mensaje”)
El Camino
14: 1-4 “No permitan que nada los turbe
o desconcierte. Confían en Dios, ¿no es así? Confíen en mí. Hay mucho espacio
para ustedes en la casa de mi Padre. Si no fuera así, ¿les habría dicho que voy
de camino para preparar una habitación para ustedes? Y si les digo que voy de
camino para conseguir que sus habitaciones estén listas, es porque regresaré a buscarlos
para que puedan vivir donde yo vivo. Y ustedes ya conocen el camino que estoy
tomando”.
5 Tomas le dijo: “Maestro, no tenemos idea
de a dónde vas. ¿Cómo esperas que conozcamos el camino?”
6-7 Jesús les dijo: “Yo soy el Camino,
también la Verdad y también la Vida. Nadie llega al Padre, separado de mí. Si
ustedes realmente me conocieran, conocerían también a mi Padre. A partir de
ahora, ustedes lo conocen. ¡Incluso lo han visto!”
8 Felipe le dijo: “Maestro, muéstranos al
Padre, y entonces estaremos satisfechos”.
9-10 “¿Han estado conmigo todo este
tiempo, Felipe, y todavía no lo comprendes? Verme a mí es ver al Padre.
Entonces, ¿cómo puedes preguntar: ‘¿Dónde está el Padre?’¿No crees que yo estoy
en el Padre y que el Padre está en mí? Las palabras que yo les he hablado no son
palabras cualquiera. Yo no las he hablado por mi cuenta. El Padre que mora en
mi elabora, fabrica, confecciona cada palabra como una artesanía en un acto
divino.
11-14 “Créanme: yo estoy en mi Padre, y
el Padre está en mí. Si ustedes no pueden creer esto, crean lo que están
viendo: Mis obras. Aquel que confía en mí, no sólo va a hacer lo que yo estoy
haciendo, sino aún cosas más grandes, porque yo, en mi camino al Padre, les estoy
dando el mismo trabajo que yo he estado haciendo aquí. Y pueden contar con esto:
A partir de ahora, lo que ustedes soliciten en la misma línea de lo que soy y
lo que hago, yo lo haré. Así es como el Padre será visto por lo que Él es en el
Hijo. Lo digo en serio. Cualquier cosa que ustedes soliciten de esta manera, yo
la haré.
El espíritu de Verdad
15-17: “Si me aman, demuéstrenlo
haciendo lo que les he dicho. Voy a hablar con el Padre, y Él les proveerá otro
Amigo para que así siempre tengan a alguien con ustedes. Este Amigo es el
espíritu de Verdad. Este mundo carente de Dios no puede reconocerlo porque no
tienen ojos para verlo, no sabe qué buscar. Pero ustedes le conocen, porque ha
estado con ustedes, ¡e incluso estará en
ustedes!
18-20 “No los dejaré huérfanos. Voy a
volver. Dentro de muy poco el mundo no me verá más, pero ustedes me verán
porque estoy vivo y ustedes están a punto de tener vida también. En ese momento
sabrán con certeza que estoy en mi Padre, y que ustedes están en mí y yo en ustedes.
21 “La persona que conoce mis
mandamientos y los guarda, ese es el que me ama. Y la persona que me ama será
amado por mi Padre, y yo le amaré, y me haré claro y evidente a él”.
22 Judas (no el Iscariote) le dijo: “Maestro,
¿por qué estas a punto de hacerte claro para nosotros, pero al mundo no?"
23-24 “Porque este es un mundo sin
amor”, dijo Jesús, “es un mundo ciego. Si alguno me ama, guardará mi palabra cuidadosamente
y con atención y mi Padre le amará -¡nos mudaremos a su mismo vecindario! No
amarme significa no guardar mis palabras. El mensaje que ustedes están
escuchando no es mío. Es el mensaje
del Padre que me envió.
25-27 “Les digo estas cosas mientras
todavía estoy viviendo con ustedes. Ese Amigo, el espíritu santo que el Padre
enviará a mi solicitud, hará que todo sea claro para ustedes. Él les recordará
todas las cosas que les he dicho. Los estoy dejando bien y equipados. Este es
mi regalo de despedida para ustedes: Les dejaré paz. No los dejo como estaban:
abandonados, despojados. Así que no se
alteren. No sean perturbados.
28 “Ustedes me han oído decir: 'Me voy,
pero volveré'. Si me amaran, se alegrarían de que yo estoy de camino al Padre,
porque el Padre es mi meta y el propósito de mi vida.
29-31 “Les he dicho esto de antemano,
antes de que suceda, y así, cuando esto ocurra, la confirmación de mis palabras
profundizará su creencia en mí. Yo no voy a hablar con ustedes mucho más de
esta manera porque el jefe de este mundo carente de Dios está a punto de
atacar. Pero no se preocupen, él no tiene nada conmigo, no tiene ningún derecho
sobre mí. Pero para que el mundo pueda conocer a fondo cómo yo amo al Padre,
estoy llevando a cabo las instrucciones de mi Padre hasta el último detalle.
“Levántense. Vámonos. Es hora de salir
de aquí”.
Traducción por Claudia Juárez Garbalena.
Scripture taken from The Message. Copyright © 1993, 1994, 1995, 1996, 2000, 2001, 2002. Used by permission of NavPress Publishing Group.
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