Testimonio de Frannie Higdon. Sanada de cáncer.
Escrito el 25 de julio de 2017.
Este último año ha sido todo
un viaje para mí. Pero los últimos 5 meses han sido los más difíciles con los
que me he enfrentado en mi vida. Quiero compartir parte de ello porque siento
que esto es lo que Dios quiere que haga. También siento fuertemente que hay un
montón de necesidades físicas por ahí y quiero animarte a recordar que Dios es
un Dios bueno. Dios es un Dios amoroso. Dios es un Padre que desea, más allá de
nuestro entendimiento, cuidar de cada necesidad que tenemos. Dios es un Dios
que dio un pago por nosotros y es gratis, es nuestra entrada de una vez por
todas para sentarnos a los pies de nuestro Padre con la expectativa de que todo
va a estar bien. ¡Él es un Dios bueno, muy bueno!!
Después de regresar de la
India en noviembre pasado, no me sentía bien. Yo no estaba preocupada, había
pasado 3 semanas en un país muy diferente al mío, y sabía que tomaría un tiempo
para que mi cuerpo se reajustara. Pero tenía una tos que había comenzado en
julio, antes de que nos fuéramos, y parecía estar empeorando cada día. Cuando
volvimos estaba tan mal de esa tos que me mantenía despierta por la noche.
Le dije a Dios que
tendría que sanarme porque no iba a ir al médico. A principios de marzo, estaba
pintando una de nuestras habitaciones, y me torcí la espalda. A las 10 de la
noche estaba con tanto dolor que Scott me llevó al hospital (fue gracioso cómo
ese dolor causó que mi convicción de no ir a un médico, cambiara drásticamente 😉). Este es un testimonio muy largo,
así que les estoy dando la versión más corta. Después de una tomografía
computarizada se descubrió que tenía un tumor en mi pulmón. Algunos de ustedes
en este momento están diciendo: "¡No me sorprende, ella ha fumado durante
muchos años!". Hablaré de eso más tarde.
Después de una broncoscopia,
me dijeron que tenía cáncer. ¡Wow! fue un informe que no esperaba. Una vez más
esta historia es muy complicada, pero estás recibiendo una versión corta. Ese
fue el comienzo de un viaje muy oscuro para mí. No he tenido miedo de muchas
cosas; bueno, sí, las arañas y los insectos me asustan, jeje. Este informe con
el tiempo, me aterrorizó, me congeló y me causó gran tristeza y miedo y
vergüenza, etc., etc. Yo estaba tan paralizada que clamaba a mi Dios todos los
días: "ayúdame Padre, tengo miedo, no sé qué es lo que debería hacer, no
quiero morir, sé que todavía tienes cosas que quieres que haga, etc". La
palabra clave comienza aquí y es “yo”. La realidad era que Dios esperaba que
fuera a Él y Él me diría qué hacer. Yo pensé que tenía que resolverlo todo. No
compartí acerca del informe de los médicos, porque sabía que iba a sorprender a
la gente, y que a algunos les causaría miedo. ¡Así que es innecesario decir que
fue un viaje solitario a excepción de la bondad amorosa de mi Dios!!
Seguí luchando con mi
mente, esta es una lucha diaria para todos nosotros. El diablo da un informe: “tienes
cáncer, vas a morir, tu provocaste esto, ¿por qué hiciste esto?” La lista es
larga… El reporte de Dios es, que por sus llagas fuimos nosotros curados, Él
dio libremente, libremente recibe, Dios nunca tienta a ningún hombre y
absolutamente no es Su voluntad que alguien esté enfermo, ¡PUNTO!!
Eventualmente me convencí
de que Dios me amaba y de que Él estaba luchando por mí. Créeme que no fue fácil
para mí llegar a este punto. No fue a través de ninguna bondad mía que hizo que
esto sucediera. Cuando comencé a pensar en todas las cosas que Dios había hecho
por mí a lo largo de los años, mi corazón comenzó a cambiar de centrarse en la
oscuridad a centrarse en Su bondad. La mente no puede sostener dos pensamientos
al mismo tiempo, así que finalmente Dios fue capaz de hablar conmigo porque ya
no estaba en un estado de constante de pánico. Él comenzó a alentarme y recibí ese
aliento libremente.
Ahora, aquí está el
comienzo de la liberación. Dios me aseguró que todo iba a estar bien. Él
proveyó a personas que oraban y creían que la Palabra de Dios es verdad. “Si
dos de ustedes están de acuerdo, se hará”. Él proveyó a personas que me
llamaban con frecuencia y me recordaban que Dios me amaba, y que Él no
permitiría que nada me sucediera. Él proveyó a gente que me llamaba y me decía:
“He estado pensando en ti y estoy orando por ti”, y ellos no sabían lo qué
estaba pasando. No compartí esto con muchos porque Dios me dijo que protegiera
mi corazón, que lo guardara con toda diligencia. Cuando una semilla negativa se
siembra, puede hacer raíz, y somos tan rápidos para decir cosas estúpidas como:
"¿haz orado por eso?, ¿Ya le preguntaste a Dios?, ¿estás creyendo?"
Esto es lo de lo que Dios me dijo que guardara mi corazón. Él me dio muchas
señales, porque Él sabe que puedo ser necia algunas veces.
Él me levantó cada vez que
estaba en el piso con miedo. Me animó cuando todo lo que hacía el diablo era
intentar aterrorizarme. También hubo quienes me recordaron que había fumado y
que probablemente debería estar lista porque ahora iba a pagar por lo que había
hecho mal. Hubo quienes profesaban que Dios los había inspirado a llamarme y a compartir
algo de sabiduría sobre qué es lo que yo debería hacer. Dios hizo esas
situaciones claras como el agua al decirme que eso era ego, y que no los escuchara.
¡Satanás es un matón, y la forma de lidiar con un matón es ir a buscar a tu
hermano mayor y a tu padre y lidiar con el matón hasta que se detenga! A veces
en la vida tú también tienes que decirle a los negativos y pesimistas: "¡CALLATE!"
Bueno, como sea, perdón
por el sermón. Fui a muchas citas con diferentes médicos, pero el último fue un
oncólogo radiologo. Cuando entré en su oficina, la chica en el mostrador dijo: "tú
no pareces tener cáncer", la enfermera de la oficina dijo: "tú no
pareces tener cáncer". El técnico de laboratorio dijo: "tú no pareces
tener cáncer". La semana anterior había estado en el hospital para una
serie de pruebas y mi nivel de consumo de oxígeno era de 87. Esto no es bueno.
Ahora era de 98, y mi corazón comenzó a esperar que Dios hiciera cosas
asombrosas para mí. Me hicieron una tomografía computarizada, y Dios me mostró
que estaba haciendo una cosa maravillosa para mí. Después de la exploración y
mi regreso a la oficina, el informe fue que el tumor se había encogido. El
doctor no pudo concebir esto en su cabeza. Dijo que no era cierto. Le dije
"Gracias por todo, está hecho, no voy a volver más".
El médico me rogó que me hiciera
otra tomografía, eso sería la siguiente semana. Dios me dijo me que la hiciera,
que estaba bien. Nuevamente hay tantos detalles de esta liberación que no puedo
compartir todos.
Mientras tanto, mi hija
Ally se trasladaba de Baltimore a San Diego. Estuvimos haciendo el viaje con
ella para ayudar lo más que pudieramos. Estábamos en una parada para hacer un
descanso en Illinois o Nebraska y una mujer se acercó a mí en el baño. Ella
dijo: "eres una hermosa, hermosa mujer, Dios quiere que sepas que escucha
tus oraciones y las está respondiendo, etc.". Nunca la vimos salir de ese
cuarto de baño. ¡Si!!! Yo creo que era
un ángel, ¡mi Papá estaba luchando por mí!
Nos detuvimos para ver a mi
otra hija, Abby, en Denver. Era muy difícil caminar porque la altitud es muy
diferente ahí. Tuve un temor momentáneo de que no era real que Dios me
estuviera sanando. Lidié con eso respondiendo con las escrituras. Finalmente
terminamos en algunos de los parques nacionales, y mientras caminábamos grandes
distancias, el viaje hacia abajo se hizo fácil. El viaje de regreso a la cima
fue muy desafiante. Pero Dios me dijo que continuara, me dijo: “Yo te estoy sanando”
y me dijo que Él es fiel a Su Palabra. Mi corazón estaba lleno de la expectativa
de que, ¡eso es todo! ¡Vamos! !Adelante Dios!, estoy sanada al 100% ¡Alabado
sea Dios!!!!
No estoy compartiendo
esto para mostrarte lo extraordinaria que yo soy. Yo no soy extraordinaria en
absoluto, nunca he tenido tanto miedo, y sin embargo, Dios me tomó en Sus
brazos y me sanó. Cuando me di cuenta de que yo, yo, yo, yo no podía hacer
nada, gemí a Dios y Él me sanó. Si estás luchando con alguna enfermedad,
recuerda que Dios te ama muy profundamente. Él no desea que mueras, como
cristianos estamos constantemente luchando entre el buen informe de Dios y el informe
de las sugerencias del diablo. He aprendido a alentar y a hablar del gran amor
que nuestro Dios tiene por nosotros. A veces mis peores enemigos eran los
creyentes y su incredulidad. No porque sean malos, sino porque no creen
todavía, igual que yo tampoco lo hacía, que Dios nos ama tanto y que dio a Su
hijo por ti y por mí. Sé que hay quienes dirán que lo que pasó fue culpa mía,
hay quienes dicen que fue la voluntad de Dios que fuera sanada, mientras que otros
no lo son. Estas son mentiras, no las creas. Dios te ama individualmente y hará
lo que sea necesario para animarte, alentarte y fortalecerte. No tengas miedo
de que Él te esté mirando con disgusto cuando estás derrumbado. Él viene hacia
ti y te levanta en Sus brazos, Él está ahí para protegerte. Mi perspectiva ha
cambiado drásticamente y nunca más voy a permitir que el diablo me aterrorice.
Y mientras pienso en esto, hay quienes han dormido prematuramente. He oído decir
a la gente de tiempo en tiempo: "bueno fue porque no creyeron" ¡Creo
que eso es una mierda! Creo que lo que pasa es que, sabemos que Dios es un Dios
en quien se puede confiar, pero a veces pensamos que necesitamos hacer algo y
no podemos. A decir verdad, fue una carga el leer publicaciones de aquellos que
son perfectos y lo proclaman a diario. ¡Dios es un Dios tan bueno y cuando lees
el Antiguo Testamento ves cuántos fueron honestos en sus gemidos a Dios!
Te amo y si hay algo que
puedo hacer por ti, déjamelo saber.
Lee Romanos 5 ¡es
poderoso y verdadero!!! Y el Salmo 139.
Hoy es un nuevo día para
regocijarnos en el amor de Dios por nosotros. ¡Descansa en Él!!!
Traducido por Claudia Juárez Garbalena
Comentarios
Publicar un comentario