Mira lo que Jesús hace. Devocional. De Joseph Prince
Lucas 1:37 porque nada
hay imposible para Dios.
Es posible que hayas
escuchado de amigos o hayas visto en libros cristianos la pregunta popular,
“¿Qué haría Jesús?”. Es una pregunta que se les enseña a los cristianos a
hacerse frente a un problema.
Pero cuando te preguntas,
“¿Qué haría Jesús?” en medio de cualquier situación, estás sujeto a tu propia
interpretación y teología. Por ejemplo, si eres de una iglesia que no cree que
Jesús sane hoy, puedes pensar que así es como Jesús oraría por los enfermos,
"Oh Padre, dale paciencia para soportar sus sufrimientos" y procedas
a orar de esa manera para una persona enferma. Entonces, cuando tratas de
pensar en lo que Jesús haría, ¡estás volviendo a tu carne!
Quizá el recordatorio
debería ser: "Mira lo que hace Jesús". Cuando yo predico, miro lo que
Jesús está haciendo o guiándome a hacer. Si Él me pide que diga o haga algo, lo
digo o lo hago. ¡Sé que no estoy en el púlpito para manifestar al Pastor Prince
o su carne, sino para manifestar a Jesucristo, ¡para quien nada es imposible!
En un servicio dominical,
inspirado por Dios, compartí con la congregación que Él quería restaurar artículos
perdidos. La semana siguiente, una miembro de la iglesia escribió: “El domingo
pasado, pastor Prince, usted mencionó que el Señor nos ayudaría a recobrar objetos
perdidos. Sabía que la palabra era para mí. Mi pulsera y anillo de diamantes
habían estado perdidos durante semanas... Alabado sea Dios, cuando regresé a
casa ese día, mi doméstica colocó los artículos perdidos en mis manos. Los
encontró a las 10:30 de la mañana mientras yo todavía estaba adorando en la
iglesia".
En otra ocasión, estaba
orando por una mujer en silla de ruedas cuando sentí que Dios me decía que la
levantara de su silla de ruedas. Te digo, me alegré de que antes de darme
cuenta de lo que estaba haciendo, ¡ella estaba de pie sin ayuda! Ahora, si me
hubiera tomado el tiempo para pensar: "Dios mío, ¿qué estoy
haciendo?", mi pensamiento podría haber obstaculizado mi obediencia a lo
que Dios me estaba guiando a hacer.
Entonces, cuando estás
siendo guiado a hablar con alguien, mira lo que hace Jesús. Cuando ores por tu
hijo, mira lo que hace Jesús. Cuando confieses la Palabra de Dios en tu
situación, ¡mira lo que hace Jesús! ¡Mantén tus ojos en Jesús, para quien nada
es imposible!
Comentarios
Publicar un comentario