Dios puede hacer un camino. Fragmento de "Ven a la mesa", de Joseph Prince.

 

Es posible que yo no entienda por completo las circunstancias por las que estás atravesando o la profundidad de tu desesperación mientras observas a tu ser querido luchar por mantenerse con vida. Lo que sí sé es esto: Dios te ama más de lo que puedas comprender, y puede abrir un camino incluso cuando parece que no hay camino.

Éxodo 14 registra cómo los hijos de Israel pensaron que estaban sin escapatoria condenados cuando el poderoso ejército egipcio se acercó a ellos. Parecía que la muerte era inevitable. Serían masacrados por los egipcios o perecerían en la tumba acuosa del Mar Rojo. Pero quiero que vean lo que les dijo Moisés:

Éxodo 14:13,14: Y Moisés dijo al pueblo: No temáis; estad firmes, y ved la salvación que Jehová hará hoy con vosotros; porque los egipcios que hoy habéis visto, nunca más para siempre los veréis. Jehová peleará por vosotros, y vosotros estaréis tranquilos.

Entonces Dios abrió el mar y los hijos de Israel "caminaron en lo seco en medio del mar" (Éxodo 14:29). Pero Dios no se detuvo ahí. Dios hizo que el mar volviera a su profundidad total mientras las formidables fuerzas de Faraón aún los perseguían, y amo cómo la Biblia lo explica: “No quedó de ellos ni uno” (Éxodo 14:28).

CUANDO EL ENEMIGO INTENTA TRAER UN SÍNTOMA DE LA MALDICIÓN, REHÚSATE A ACEPTARLO.

Amado, tú o tu ser querido podrían enfrentarse a una situación médica abrumadora y aparentemente imposible. Todas tus angustias y lágrimas no pueden cambiar tu situación, pero hay Alguien que sí puede. No tengas miedo. Quédate quieto y ve la salvación del Señor. Él peleará por ti. Él vencerá a tus enemigos por ti. No sigas preguntando por qué tienes esa enfermedad. No aceptes la enfermedad ni creas la mentira de que mereces estar enfermo por lo malo que has hecho. El Señor Jesús ya pagó el precio por tu completitud. Simplemente pon tu mano en la Suya y deja que Él te guíe a través de tu situación.

Él te hará caminar por tierra seca en medio del mar. Los informes negativos, las estadísticas médicas y los síntomas que ves pueden significar una situación inevitable, pero Él abrirá un camino que dejará atónitos a todos los que te rodean. El Mar Rojo que pensabas que te ahogaría se convertirá en cambio en el cementerio de tus enemigos. Es posible que los veas hoy, ¡pero no volverás a ver esos síntomas opresivos nunca más!

QUEDATE QUIETO Y VE LA SALVACIÓN DEL SEÑOR. ÉL PELEARÁ POR TI.

Yo veo que tus migrañas se han ido. La inflamación en tus articulaciones se ha ido. La fatiga paralizante se ha ido. El informe negativo sobre tu bebé a punto de nacer se ha ido. La sangre en tu orina se ha ido. ¡Ni uno de ellos permanecerá!

Incluso cuando los expertos han dicho que solo te quedan meses o incluso días de vida, Dios puede abrir un camino. De cara a la muerte, levanta los elementos de la santa Comunión y proclama que Su sangre te da vida. Su sangre te da el perdón de los pecados. Incluso si los médicos han intentado todo lo que saben y tu ser querido todavía no responde, el Señor puede abrir un camino. Incluso si has sido esclavo de interminables rondas de tratamiento y medicación desde que tienes memoria, ¡Él puede abrir un camino!

Joseph Prince, “Ven a la mesa”, págs. 109-111.

(Este libro saldrá a la venta en español a mediados de octubre).

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