¡NO MÁS MIEDO! JOSEPH PRINCE. DÍA 7

 

…Aquel que es poderoso para hacer todas las cosas mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos, según el poder que actúa en nosotros.

Efesios 3:20

Pensamiento:
 El suministro inagotable de Dios siempre es más grande que tus necesidades.

Cuando te enfrentas a una carencia, ¿en qué elijes enfocarte? Nuestras mentes lógicas nos dicen que analicemos el problema y usemos todos los recursos que podamos reunir para resolver el problema.

La cuestión es que, cuando te concentras en la magnitud de tu necesidad y en lo poco que tienes en tus manos, eso puede dejarte completamente abrumado.

En 2 Reyes 4:1, encontramos a una viuda que buscó desesperadamente la ayuda del profeta Eliseo para pagar una gran deuda a su acreedor.  Si no podía pagar, el acreedor tomaría a sus dos hijos como esclavos.

Cuando Eliseo le preguntó: “¿Qué tienes en casa?”, ella respondió: “Tu sierva no tiene nada en casa, solo una vasija de aceite” (2 Reyes 4:2).

Imagina su sorpresa cuando esa pequeña vasija de aceite continuó llenando y llenando los numerosos recipientes que había pedido prestados a sus vecinos; de hecho, solo cesó cuando se quedó sin vasijas.

La provisión del Señor estaba limitada solo por la cantidad de recipientes que había traído a la fiesta. Y Su provisión sobrenatural no solo saldó su deuda, sino que también les dejó a ella y a sus hijos con lo suficiente para vivir de ello.

Este es el mismo suministro sobreabundante que el Señor provee para ti y a tus seres amados hoy. Al Señor no le preocupa cuánto tengas a mano, porque con Él, incluso lo poco se convierte en mucho cuando lo pones en Sus manos.

Si hoy estás luchando con preocupaciones porque no puedes ver cómo lo poco que tienes puede suplir la enorme demanda, ¿puedo alentarte a traer al Señor Jesús a tu situación? Él te ama y se deleita no solo en suplir, sino en traer un suministro sobreabundante en cada área de necesidad.