¿CONECTADOS A QUIEN? Parte IV – Por Juan Luis Molina
CARTAS ENTRE CREYENTES
Enviado: jueves, 26 de mayo, 2011 11:25:13
Asunto: FW: Sobre Las "Sagradas Convicciones"
Asunto: FW: Sobre Las "Sagradas Convicciones"
.... Si alguno entre vosotros se cree sabio en este siglo, hágase ignorante, para que llegue a ser sabio....Así que, ninguno se gloríe en los hombres; porque todo es vuestro: sea Pablo, sea Apolos, sea Cefas, sea el mundo, sea la vida, sea la muerte, sea lo presente, sea lo por venir, todo es vuestro, y vosotros de Cristo, y Cristo de Dios. (1ª Corintios 3:18, 21,22).
De verdad amadísimo Teófilo que no hay otro medio. Para aprender las cosas celestiales y divinas, que son opuestas y contrarias a las carnales en las que nacimos, hay que hacerse ignorantes y no hacer otra cosa sino desaprender. Quedarse en punto muerto. En la Presencia del Todopoderoso, toda la sabiduría de este siglo no vale un pimiento. No sirve absolutamente para nada para aprender los asuntos de Dios.
La hoguera que enciende Cristo en nosotros, cuando nosotros la encendemos y se lo permitimos, lo que quema es precisamente es eso mismo: todo lo que habíamos acumulado pensando nosotros que "sabíamos," y nos habían enseñado los hombres - Eso es precisamente lo que arde en nosotros. El fuego recalentado siete veces de Nabucodonosor, esta hoguera encendida del espíritu, es como el fuego aquel que puso Elías y que lamió hasta las piedras que había alrededor del becerro en el altar. Nos quema, nos derrite toda la paja, el heno, toda la madera y la hojarasca que no servía para nada, y nos deja desnudos en la Presencia del Padre. - Y es genial hermano mío, toda esa basura se consume en su fuego como la grasa de los carneros. Puedes creerlo Teófilo, arde como las fallas en Valencia.
Sin embargo, hay muchos hermanos, y yo me llevé pensando igual que ellos treinta años, que piensan lo contrario, yo me llevé treinta años convencido, no haciendo otra cosa sino cavando cisternas rotas y acumulando "conocimiento," pensando que así alcanzaría a ser sabio y a conocer al Padre - Pero si queremos acercarnos confiadamente al trono de la gracia del Padre, para recibir Su oportuno socorro, debemos ser tan "sabios y prudentes" como los niños de pecho; es decir, tenemos que reconocer que somos absolutamente ignorantes en Su Presencia. Al fin y al cabo, eso es lo que está escrito, que solo los niños son dignos de entrar en Su Reino. Pero a mí, queriendo ser sabio, me sucedió que me volví un necio. Deberíamos preguntarnos: Aquel que hizo la boca ¿No hablará? - Aquel que hizo el oído ¿No oirá? - ¿para qué entonces buscamos al Padre y Su oportuno socorro en los hombres, y no vamos directamente a nuestro Padre? - Así estuve yo treinta años, Teófilo. En vez de buscar las palabras y el consuelo de Su Boca, las procuraba en las bocas de los hombres. Y unos decían así, y otros asado. - Consideraba casi del mismo valor que las Palabras de Dios las palabras que me enseñaban Sus santos hombres, y siempre me parecía que Su oportuno socorro se encontraba en los consejos que de los hombres escuchaba, y con la ensalada mental que me producía la acumulación del conocimiento escuchando a los hombres, más lejos me parecía que se encontraba el Padre. Era como un espejismo en el desierto.
Hoy, sin embargo, después de desesperar de "mí mismo" y de cansarme de andar por el desierto de los méritos y sacrificios, por el desierto de las obras, de las mías propias y de cualquier ser humano, recostándome a la sombra de la gracia, me doy cuenta de cuan disparatadas pueden llegar a ser las palabras, las mías propias y las que salen por boca de Sus santos algunas veces, pero yo neciamente siempre las aceptaba todas como si fuesen directamente provenientes del Padre.
Pero ahora Teófilo, que ya no tengo confianza en ninguna carne, ni en la mía propia ni en la de nadie, comparado con los últimos dos años, los casi treinta que me llevé intentando conocer al Padre por boca de los hombres, estos dos últimos, cada uno, se me han pasado como mil años. Tal es la diferencia entre el Dios que conocía antes, en comparación con Este glorioso Dios que Se me dio a conocer ahora a Sí mismo salido del espíritu y sólo por Su bendita gracia. ¿Te das cuenta? - si se quiere entender lo que nuestro Abba Padre nos dice y ha escrito en las páginas de la Biblia - no hay otra manera - hay que hacerse plenamente ignorante y reconocer que no sabemos nada como conviene. ¿Qué te ha enseñado a ti Dios directamente? ¿Y cuanto de lo que sabes te lo han explicado los hombres? pues aunque lo que sepas, y coincida con lo que el Padre te enseñe, será mejor "desaprenderlo" otra vez en Su Presencia; para que Su espíritu te lo enseñe y te lo muestre TODO fresco y nuevo.
Y si alguno se imagina que sabe algo, aún no sabe nada como debe saberlo. 1ª Corintios 8:2
Jamás conoceremos la gloria, el tremendo esplendor y la hermosura de Dios porque acumulemos conocimiento, sino porque descargamos lo que suponemos que sabemos. Las puertas de entrada de las murallas en las ciudades en el oriente, eran estrechas y tenían la forma del ojo de una aguja. Eran construidas así para que los camellos que venían en las caravanas atravesando el desierto, descargasen sus mercancías a la entrada y fueran revisadas antes de entrar en la ciudad. Los camellos tenían que entrar desnudos por aquella puerta. Este es un bellísimo simbolismo que emplea Dios en Su Palabra. Las cargas que traíamos a nuestros lomos no cabían por el ojo de la aguja en Su Reino. Hay que desnudarse de toda la sabiduría animal, terrenal y diabólica que hayamos acumulado en el desierto del mundo para poder recibir la gracia del Padre y entrar sin mérito alguno a Su Reino. Lo que se acumula en seminarios y clases durante treinta años te lo puede enseñar tu espíritu en un solo día, este es el significado Bíblico en griego y arameo de "redimir el tiempo."
A mí me pueden acusar falsamente de que predico que no se debe leer la Biblia, porque digo que con el Padre no se debe acumular conocimiento. Esto es bastante absurdo y jamás diría tal cosa. La Biblia nos muestra la Palabra de Dios, es el Libro de libros que fue escrito por hombres de Dios inspirados por el Espíritu Santo y leída con los ojos del espíritu brilla de una manera portentosa, está llena de colores y de las más dulces melodías del Creador para con los Suyos, ¡No hay libro más hermoso y digno de ser leído sobre esta tierra!
También puedo ser acusado de que no tengo respeto alguno por bernabés ni pablos, ni claudias ni gracinhas ni juanluises molina. Y es cierto en el sentido de que no tomo como palabras de Dios todo lo que sale de sus bocas. A todos los que nos hemos vuelto ignorantes, a todos los analfabetos nos ha enseñado nuestro Dios Todopoderoso que igual de muertos en delitos y pecados estamos todos. Y que si "algo" tenemos de bueno, lo tenemos todos en la misma medida. Cristo en nosotros es lo único bueno y agradable en gran manera que tenemos todos. Así que, ¿Quién es pablo? y ¿quién es apolos? - ¡Servidores por medio de los cuales hemos creído!, pero ni el que planta ni el que riega son "alguna cosa".
EL QUE TENGA OIDOS PARA OIR QUE OIGA
Hay una distinción que estoy persuadido está dando hoy en día a darnos a conocer Dios de una manera sumamente palpable y tangible, la cual nos llena de gozo y de regocijo el corazón a los que abrimos nuestros oídos. Esta revelación, que aunque no es nueva, al mismo tiempo es nueva y fresca, es algo que ha puesto de patas arriba nuestras vidas y ha vuelto del revés casi todo lo que pensábamos. A CASI TODO LE HA DADO VIDA, LUZ, Y COLOR. - Y es cierto que, en nuestro entusiasmo, habiéndonos aparecido en frente de nuestros ojos esta bendita revelación y sorpresa, y repitiéndola deseando como niños dejársela ver también a nuestros hermanos, hemos sido acusados por estos de locos - de estar viendo visiones y creando en la iglesia muchas perturbaciones. - Pero fijaros bien, daros cuenta que así, de esa misma manera recibieron también la noticia de boca de aquellas mujeres que habían ido al sepulcro, y habían recibido la noticia del ángel que vieron sentado en la roca a la puerta del sepulcro, diciéndoles a estas mujeres que Jesús había resucitado. - Los discípulos, que estaban tras puestas cerradas por miedo a los judíos, pensaron de estas mujeres, igual que piensan de nosotros. - Igual han recibido nuestro anuncio muchos de nuestros hermanos que también siguen encerrados en su miedo religioso. - Y es que el anuncio que les hemos predicado, tiene mucho que ver con el que dieron en aquel entonces aquellas benditas mujeres: Que la Palabra escrita en la letra muerta en la Biblia, ha resucitado y se ha hecho VIVA en nuestros corazones. Les explicamos que, en el espíritu, y además, según está también escrito, ya no precisamos que bernabes o pablos o apolos......ni nadie nos explique al Padre, sino que Cristo Jesús mismo, la Cabeza de este bendito Cuerpo celestial y divino, nos enseña las cosas del Padre en nuestros corazones. - Y nos llaman locos. Nos difaman y nos dicen ser los anticristos y que estamos haciendo divisiones en el Cuerpo, por decir una cosa de estas. Pero lo que es cierto, lo que de verdad ocurre, y está ocurriendo en muchos miembros a la vez y por todo el mundo, es que es que se ha encendido un fuego y una “hoguera de Elías” en nosotros por la gracia divina del Padre, y aunque queramos, ya no podemos dejar de repetir a voces lo que oímos en nuestro espíritu. Sencillamente: La Palabra escrita ha pasado y ha venido a ser la Palabra VIVA en nuestros corazones. Y esto amados hermanos no es más que lo que está escrito: Que ya no vivimos más nosotros, sino que Cristo es quien vive ahora su vida en nosotros. Que esta es la unción del santo que tiene cada uno en este bendito Cuerpo celestial de Cristo a través del cual aprendemos todo del Padre. Ni más ni menos. Así de fácil y así de sencillo.
Explicándolo mejor:
LA PALABRA ESCRITA TESTIFICA AL CRISTO QUE TU TIENES DENTRO
Hay expresiones idiomáticas y modismos en los lenguajes de todo el mundo, que son del todo un enigma para un extranjero. Aun para aquellos que tengan un buen conocimiento de la gramática de ese idioma en particular, si no se conocen los hábitos y costumbres de las personas del lugar, si no se conocen estas figuras literarias y maneras de hablar, muy difícilmente se puede entender lo que leemos o escuchamos. Aunque hayas estudiado una lengua en la mejor de las universidades, si no has nacido en el lugar, muy difícilmente podrás llegar a comprender todo lo que estas expresiones y modismos pueden querer decir. Por eso es tan difícil entender y disfrutar la Biblia. Sobre todo para un occidental. Porque la Biblia es un libro oriental que contiene expresiones y modismos típicos del lugar y de la época en que fue escrita. Es un libro en el cual sus enseñanzas se dan plasmando las costumbres y hábitos de un pueblo oriental. Por eso precisamos de entender los orientalismos y expresiones idiomáticas que contiene si queremos entender y disfrutar la Biblia.
Pero eso no es una limitación para Dios. Nuestro Padre, el Creador de los cielos y de la tierra es un Dios Todopoderoso. Sería una desastrosa presunción de nuestra parte limitarlo a las páginas en un libro. Si, es cierto que, las Escrituras, son una vía por la cual podemos conocer a Dios. Pero no como piensan muchos, la única vía que el Creador hizo disponible para llegarlo a conocer. Pensar que Su Palabra, la Palabra que Dios elevó por encima de Su nombre, se encuentra solo en la Biblia es limitar al Dios Todopoderoso al Cual los cielos de los cielos no pueden contener. Y sin embargo es así que muchos hermanos intentan hacer creer a los hombres: Que la única vía para conocer al Padre, es conocer lo que en la Biblia está escrito. Pero… ¿No sería mucho más lógico pensar, que, el espíritu que el Padre repartió en la misma medida a cada uno de Sus hijos, lleva empapado en sí mismo toda la información necesaria que precisemos conocer acerca del Padre, y que coincide perfectamente además con aquello que haya dejado por escrito en Sus Escrituras? - ¿Sería difícil haberlo programado así para Quien hizo el universo?
El espíritu es quien nos enseña verdaderamente al Padre. Podríamos decir que, Su Palabra escrita, se encuentra grabada de una manera VIVA en el código genético del espíritu que el Padre te ofreció, por Su divina gracia, el día en que fuiste renacido de lo alto. Desde ese mismo día se puede comenzar a conocer al Padre. Y Él mismo, a través de ese espíritu que es Cristo en ti, es sumamente capaz y poderoso para irte confirmando, también a través de Su Palabra escrita, lo que le haya inspirado a Sus santos hombres, y además, también por boca de otros hermanos que te acerque te puede dar a oír Su sabiduría. Y siempre escucharás Su misma voz. Siempre fresca y nueva. De muchas maneras te podrá el Padre confirmar, aquello que a ti te enseñe en Su espíritu primeramente. Esa es precisamente la labor del espíritu. Sin embargo, el pensar que las cosas del Padre las conoceremos a través de lo que nos enseñen las denominaciones, los seminarios, las disciplinas, los esfuerzos humanos, las instituciones religiosas, las organizaciones llamadas sagradas, los padres terrenales......y todas las demás jerarquías y modelos que nos hayan enseñado, no han hecho otra cosa sino ser un desierto, un obstáculo, un impedimento y una muy errada CONVICCIÓN en nuestro corazón, que nos ha robado de toda la bendición que fue conquistada con el SACRIFICIO UNICO de Jesucristo para cada uno de los hijos amados de Dios. - ¿Te das cuenta? ¿Ves lo sumamente importante que es "DESAPRENDER" todo aquello que pensamos que sabemos delante de nuestro Abba Padre? - La vida del Cristo resucitado que puso, en la misma medida, a cada uno de Sus hijos nuestro Abba Padre, es el espíritu o pneuma hagion - poder desde lo alto - es la conexión que hizo Dios disponible con Él, para cada uno de Sus hijos, para que aprenda DIRECTAMENTE de Él TODAS SUS COSAS. No podemos presumir en Su Presencia y decir que sabemos - debemos ser como los niños de pecho y beber de la leche espiritual NO ADULTERADA. Así de fácil y así de sencillo.
Sin embargo, no en tanto, si fuese en la Biblia que solamente pudiese conocer a Dios el hombre, si eso fuese cierto ¿cómo entonces podrían conocer a Dios los ignorantes y los analfabetos? ¿A ellos les está negado entonces conocer a Dios?- tengamos en cuenta que, en el mundo, de los seis billones de personas que existen, hay un porcentaje altísimo de ellos que no saben leer ni escribir. ¿Será posible que Dios, entonces, solo pueda ser conocido de los sabios y entendidos letrados hombres en la tierra? - y si esto es verdad, ¿será posible que la mayor parte, que no ha leído nunca ni sabe lo que es una Biblia, no sepa nada del Creador de los cielos y de la tierra, sino solo ellos? - y que diremos, de los que si conocemos la Biblia, aunque no la entendamos, cuando en los evangelios leemos que, la mayor parte de los discípulos y seguidores de Jesús, se componía de pescadores, pastores, niños, prostitutas, leprosos, ciegos, publicanos y toda suerte de pecadores, que hacían parte del vulgo analfabeto e iletrado, que en aquel tiempo no sabía ni leer las escrituras? - Sin duda hay algo aquí que hemos considerado erradamente. Por eso ahora, que la hoguera de Su espíritu -Cristo en nosotros- nos ha derretido toda esta basura que nos cegaba nuestro entendimiento, anunciamos a nuestros hermanos que al Creador de los cielos y de la tierra tampoco deben ellos limitarlo así.
Claro que es sorprendente lo que se nos descubre cuando verdaderamente entendemos lo que se encuentra escrito en la Biblia. La sencillez de las palabras que empleó Dios y que le dio a los hombres que inspiró es absolutamente maravillosa y perfecta. Como todo lo de Dios es perfecto. Nada tienen que ver con lo que han enseñado muchas veces los hombres. - Cuando entendemos las palabras que Jesús hablaba, se nos derrite el corazón. Cuando te las explica alguien como George M. Lamsa, que nació y vivió entre el pueblo arameo que sigue hablando aquella misma lengua, es que te caes de espalda. - Tienes que haber nacido allí para comprenderla en todo su esplendor. Si se quiere realmente hacer una idea de la sencillez de las palabras de Jesús, de la forma tan simple en la que él se expresaba en su idioma y entre su gente, si quieres aprender su lenguaje, y cómo exponía sus enseñanzas, no es necesario acudir a los eruditos cursos de Cambridge ni de Alcalá de Henares, como piensan algunos, ni pasarte la vida asistiendo a clases y a larguísimos seminarios. Por ponerte un ejemplo - el mejor timbre de voz, lo cogía de las mujeres que vendían en la plaza. Escuchando Jesús los gritos de la gente en el mercado, era capaz de enseñarle más entonación, que siete meses oyendo a los eruditos fariseos. A los niños en sus juegos, escuchando a un ciego pidiendo limosna, a los mercaderes regateando sus mercancías...en fin, amando y andando entre su gente para comprender aquellas expresiones, para después poder enseñarles lo que el Padre quería que supiesen son las palabras que están escritas en la lengua aramea que Jesús habló. El amor que tuvo en Sus palabras y expresiones, eran entendibles para todo el pueblo. Así que hermano mío, la Biblia es un libro escrito con esas expresiones, y ese es el Dios de amor que allí se refleja. Pero lo más hermoso de todo, lo que anunciamos a nuestros hermanos, es que aquel espíritu que el Creador de los cielos y de la tierra que así en la Biblia se refleja, es Quien se ha revelado a través de Cristo EN NUESTROS CORAZONES. Para eso sirvió precisamente aquel brutal, animal y diabólico sacrificio al cual se entregó Jesucristo: Para llevar muchos hijos al seno del Padre.
La Palabra que Dios puso por encima de Su nombre la escribió el Padre en Cristo, de quien tú, Pablo, Apolos, Bernabé... o quien quiera que sea que le haya hecho Señor a Jesucristo en su vida, tiene la misma medida, y de quien aprendes todas las cosas.
En el amor primero
Juan Luis Molina
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Juan 16: 7,13-15
Pero yo os digo la verdad: Os conviene que yo me vaya; porque si no me fuera, el Consolador no vendría a vosotros; mas si me fuere, os lo enviaré.
Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir.
El me glorificará; porque tomará de lo mío, y os lo hará saber.
Todo lo que tiene el Padre es mío; por eso dije que tomará de lo mío, y os lo hará saber.
Juan 14: 16-20, 26
Y yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre: El Espíritu de verdad, al cual el mundo no puede recibir, porque no le ve, ni le conoce; pero vosotros le conocéis, porque mora con vosotros, y estará en vosotros. No os dejaré huérfanos; vendré a vosotros.
1ª Juan 2:20,27
Pero vosotros tenéis la unción del Santo, y conocéis todas las cosas.
Pero la unción que vosotros recibisteis de él permanece en vosotros, y no tenéis necesidad de que nadie os enseñe; así como la unción misma os enseña todas las cosas, y es verdadera, y no es mentira, según ella os ha enseñado, permaneced en él.
Juan 15: 1-57,8, 26
Yo soy la vid verdadera, y mi Padre es el labrador. Todo pámpano que en mí no lleva fruto, lo quitará; y todo aquel que lleva fruto, lo limpiará, para que lleve más fruto. Ya vosotros estáis limpios por la palabra que os he hablado. Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí. Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer. En esto es glorificado mi Padre, en que llevéis mucho fruto, y seáis así mis discípulos. Como el Padre me ha amado, así también yo os he amado; permaneced en mi amor.
Lecturas sugeridas:
“Dios Te Ama”:
“La Iglesia Que Jesús Está Edificando”:
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