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Ten una actitud de estar sentado en el trono: Descansa hasta que Dios ponga a tus enemigos por estrado de tus pies. De Joseph Prince

Originalmente publicado el 28 de diciembre de 2016.
Esta es la época en que los cristianos de todo el mundo celebran el nacimiento de Jesús. Pero ¿sabes que no tienes que esperar a la temporada festiva para caminar en paz y gozo? Puedes regocijarte a pesar de tus circunstancias, ¡porque Dios quiere que tomes una actitud de estar sentado en el trono y que descanses mientras Él se encarga de todo lo demás por ti!

Hoy, Jesús está sentado a la diestra del trono del Padre. Hebreos 8:1 Ahora bien, el punto principal de lo que venimos diciendo es que tenemos tal sumo sacerdote, el cual se sentó a la diestra del trono de la Majestad en los cielos. Y la Biblia dice que como Cristo es, así somos nosotros en este mundo (1 Juan 4:17). Esto significa que también estamos sentados a la diestra del Padre.

Ahora, estar sentado es una representación de descanso. En el Antiguo Testamento, los sacerdotes nunca se sentaban. No había sillas en el tabernáculo de Moisés o en el templo de Dios porque su obra nunca estuvo terminada. Pero Jesús se sentó porque su obra está finalizada (Juan 19:30, Hebreos 10: 11-13). Y Dios me dijo: “Hijo, dile a mi pueblo que tenga una actitud de estar sentado en el trono”. Entonces, ¿qué significa tener una “actitud de estar sentado en el trono”?

Teniendo una "actitud de estar sentado en el trono"

Salmos 110:1,2: Jehová dijo a mi Señor: Siéntate a mi diestra, hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies. Jehová enviará desde Sion la vara de tu poder; domina [reina] en medio de tus enemigos.

En hebreo, Jehová es “Yahweh”, y “Señor” es “Adonai”. Por lo tanto, el primer versículo de hecho lee: “Yahweh dijo a mi Adonai...”. Después de que Jesús venció al pecado y la muerte, y resucitó de entre los muertos, volvió al Padre. Y el Padre dijo: “Siéntate a mi diestra, hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies”. Así que la actitud de Jesús de estar sentado en el trono, es sentarse y esperar a que su Padre ponga a todos sus enemigos derrotados debajo Sus pies.

En los tiempos bíblicos, los enemigos derrotados eran traídos de regreso con cadenas y el rey victorioso se sentaba en su trono y ponía sus pies sobre la espalda de sus enemigos derrotados como un signo de victoria. Del mismo modo, los enemigos de Jesús conquistados están siendo arrastrados a él, uno por uno, y puestos bajo sus pies.

Efesios 1:20, 22–23 …Resucitándole [Dios a Jesús] de los muertos y sentándole a su diestra… y sometió todas las cosas bajo sus pies, y lo dio por cabeza sobre todas las cosas a la iglesia, la cual es su cuerpo…

Nosotros, la iglesia, somos el cuerpo de Cristo. ¿Y quién es el que hace de los enemigos nuestro escabel, nuestro estrado? ¡No somos nosotros, sino Dios mismo! La Palabra de Dios es verdad y Él sostiene Su Palabra. Dios nos está diciendo que tengamos la misma actitud de estar sentados en el trono que Jesús: que descansemos, mientras Él hace de nuestros enemigos nuestro estrado. Así que cada día que pasa, tenemos todas las cosas, incluyendo a los enemigos derrotados de enfermedad, pobreza, depresión y toda clase de maldiciones, siendo puestos debajo de nuestros pies.

Entra en el Descanso de Dios

¿Quieres conocer la definición de Dios de Su reposo? Hebreos 3 describe cómo a los hijos de Israel no se les permitió entrar en la tierra prometida porque dudaron de la Palabra de Dios. Sin embargo, en lugar de decir “no entrarán en Mi tierra prometida”, Dios llamó a la tierra prometida “Mi reposo”.

Hebreos 3:11 Por tanto, juré en mi ira: No entrarán en mi reposo.

Esto significa que lo que la tierra física fue para los hijos de Israel en el Antiguo Testamento, hoy representa la gracia de Dios y el descanso para el creyente bajo el nuevo pacto. Esa es tu herencia hoy. ¡Dios quiere sacarte de la carencia e introducirte a la tierra de abundancia! ¡Él quiere sacarte de la enfermedad a una salud robusta! Y esta tierra prometida es el lugar de Su reposo.

La Palabra de Dios siempre nos dice: “No temas, no temas”. Pero, ¿sabes que hay sólo una cosa que la Biblia nos dice que temamos?

Hebreos 4:1 Temamos, pues, no sea que permaneciendo aún la promesa de entrar en su reposo, alguno de vosotros parezca no haberlo alcanzado.

En Hebreos 4:1, Dios nos dice que temamos a no entrar en Su reposo. Ahora, muchos de nosotros nos preocupamos por muchas cosas y a todo lo que Dios nos dice que no temamos, tememos. Pero a la única cosa que Dios nos dice que temamos, ¡no tememos!

Sé Consciente del Descanso, No Consciente de los Gigantes

Hay otra lección que podemos aprender de esta historia. Dios dijo a los hijos de Israel que Él había venido para traerlos a “una tierra donde fluía leche y miel” (Éxodo 3:8). Esto significa que la tierra prometida era un lugar donde fluía la abundancia y provisión. Esta fue también una promesa segura, una declaración de lo que Dios definitivamente haría.

Éxodo 3:8 y he descendido para librarlos de mano de los egipcios, y sacarlos de aquella tierra a una tierra buena y ancha, a tierra que fluye leche y miel…

Sin embargo, ¿cuál fue la postura del pueblo de Dios cuando llegaron a Cades Barnea, la frontera entre el desierto y la tierra prometida? Enviaron a 12 espías a la tierra durante 40 días y eligieron creer el informe de los 10 espías que dijeron que los israelitas no podrían tomar la tierra porque estaba habitada por gigantes de la tribu de Anac (Números 13:33).

En hebreo, la palabra Anac significa “cadena” o “cadena de cuello. Una cadena alrededor del cuello es una imagen de un yugo que te pesa y oprime. Aunque Dios había librado a los hijos de Israel de sus amos en Egipto y ya no eran esclavos, ellos todavía tenían una mentalidad de esclavos. En lugar de enfocarse en la bondad y promesa de Dios, los hijos de Israel se concentraron en su gigantesco problema -los anaceos- y fueron agobiados por la ansiedad y el miedo.

Hoy, algunos de nosotros todavía tenemos esta mentalidad de esclavos. Estamos tan enfocados en nuestros “anaceos” -nuestros problemas y síntomas- en lugar de en la obra finalizada de Jesús en la cruz, que no podemos entrar en nuestra tierra prometida de descanso.

Ahora, quiero plantearte una pregunta que Dios me hizo, la cual tuve que contestar también. ¿Alguna vez has leído la historia de los 12 espías y te has preguntado si te unirías a Josué y Caleb, los dos espías que dijeron: “¡Vamos inmediatamente y tomemos la tierra!”– o si estarías de acuerdo con los 10 espías?

Bien, el Espíritu Santo dice: “Si oyereis hoy su voz, no endurezcáis vuestros corazones, como en la provocación, en el día de la tentación en el desierto, donde me tentaron vuestros padres” (Hebreos 3:7-9). En otras palabras, ¿son tus problemas más grandes que lo que Dios está diciendo sobre tu situación? Antes de que tu cuerpo sea sanado, antes de que el dinero esté en tu cuenta bancaria, antes de que se resuelvan todos los problemas en tu vida, ¿creerás que Dios te liberará de acuerdo a Su Palabra y caminarás en reposo?

Dios quiere que tengas la revelación de que todo lo que necesitas que Él haga por ti, ya ha sido hecho porque Jesús lo ha logrado todo por ti. Y Dios te está preguntando: “A pesar de los gigantes, ¿subirás y entraras en la tierra prometida donde se encuentra Mi descanso? ¿Puedes ser consciente del descanso, más que ser consciente de los gigantes?”

Cuando tú descansas, Él trabaja

¿Qué sucede cuando te vuelves consciente del descanso? Echemos un vistazo a este secreto escondido en la historia de cómo Jesús sanó a un hombre que había estado sufriendo de una enfermedad durante 38 años.

Juan 5:8–9 Jesús le dijo: Levántate, toma tu lecho, y anda. Y al instante aquel hombre fue sanado, y tomó su lecho, y anduvo. Y era día de reposo aquel día.

Le pregunté al Señor por qué le pidió al hombre que tomara su cama. ¿Por qué no simplemente le pidió que se levantara y caminara? Y Él me mostró que la cama es una representación de descanso. Así que lo que de hecho Jesús estaba diciendo al hombre fue: “Levántate, toma tu descanso y camina”.

Nota que ese día era sábado, el día de reposo. Por lo tanto, lo que Dios está diciendo es que cuando tú descansas, ¡Él trabaja! ¿No es esto asombroso?

Sin embargo, había un grupo de personas que estaban descontentos porque el Señor había sanado a este hombre.

Juan 5:10-12, 16 Entonces los judíos dijeron a aquel que había sido sanado: Es día de reposo; no te es lícito llevar tu lecho. El les respondió: El que me sanó, él mismo me dijo: Toma tu lecho y anda. Entonces le preguntaron: ¿Quién es el que te dijo: Toma tu lecho y anda?... Y por esta causa los judíos perseguían a Jesús, y procuraban matarle, porque hacía estas cosas en el día de reposo.

La gente religiosa estaba molesta porque era sábado. Vieron la sanidad como un trabajo. Para ellos, ¡sanar a un hombre en el día de reposo significaba que Jesús estaba trabajando en el día equivocado!

Ahora, si hubieras conocido a este hombre, ¿no le preguntarías, “Oye, ¿qué te pasó? ¿Cómo es que fuiste sanado?” En lugar de eso, la gente que lo encontró le dijo: “Es sábado; no es lícito que lleves tu cama”. Mira, ¡este hombre no había caminado en 38 años! Pero a la gente que le rodeaba sólo le preocupaba que hubiera llevado su cama el día de reposo. Así es como son las personas legalistas. No pueden ver las bendiciones, sólo los problemas.

La última frase “porque hacía estas cosas en el día de reposo” en el griego original está en el tiempo imperfecto. El tiempo imperfecto representa generalmente la acción continua o repetida. Esto significa que era un hábito para Jesús sanar en el día de reposo y que había repetidamente realizado tales milagros en el día de reposo. ¡El día en que el hombre descansa, Dios y Jesús pueden trabajar!

Tu Sanidad está en el Descanso

Otro ejemplo es la sanidad de una mujer que estuvo encorvada por 18 años. Cuando Jesús la sanó en la sinagoga, el principal de la sinagoga, el “pastor” de esta mujer, dijo: Seis días hay en que se debe trabajar; en éstos, pues, venid y sed sanados, y no en día de reposo. (Lucas 13:14).

¿Cuál fue la respuesta de Jesús?

Lucas 13:15,16 Entonces el Señor le respondió y dijo: Hipócrita, cada uno de vosotros ¿no desata en el día de reposo su buey o su asno del pesebre y lo lleva a beber? Y a esta hija de Abraham, que Satanás había atado dieciocho años, ¿no se le debía desatar de esta ligadura en el día de reposo?

Jesús dijo que la sanidad de esta mujer vino simplemente por ser una hija, una hija de Dios. Pero algunos cristianos todavía piensan que la sanidad es una obra del hombre, no una obra de Dios. Ellos no pueden creer que la sanidad pueda suceder de una forma tan simple como reposar en la obra finalizada de Cristo, diciendo y creyendo: “Señor Jesús, como tú eres libre de toda enfermedad y padecimiento, así soy yo estoy en este mundo”.

¿Sabías que las palabras “sanado” y “relajado” están vinculadas en el hebreo? Uno de los nombres hebreos de Dios es Jehová-Rapha que significa “Yo, el Señor, soy tu sanidad” (Éxodo 15:26). La palabra hebrea “rapha” no sólo significa “sanar”, sino que una de sus definiciones raíz también significa “relajado”. Así que la sanidad viene a través de estar en reposo, no trabajando. La muerte de Jesús nos ha dado vida y completitud.

Busca El Descanso Primero Para Que Puedas Estar Bien

Dios no dice: “Espera hasta que todos tus enemigos hayan sido destruidos, hasta que todos los problemas en tu vida hayan sido resueltos, entonces podrás descansar”. Él dice: “Descansa primero hasta que Yo haga de todos tus enemigos el estrado de tus pies”.

¿Qué es lo que ves cuando se trata de sanidad y liberación de una condición en tu cuerpo enfermo o en medio de retos financieros? ¿Ves la carencia y dices: “Primero tengo que salir de esta situación, y cuando haya escuchado los informes de los médicos diciendo que todo está bien, entonces podré descansar”?

Nos resulta difícil descansar porque nuestra naturaleza humana está inclinada hacia la preocupación e inquietud. Al diablo le encanta ver como reina la naturaleza humana en la iglesia y hacerte creer que solo puedes descansar cuando las cosas vayan bien o cuando veas resultados. Deja de decir: “Cuando mi hijo termine la escuela primaria, dejaré de preocuparme y descansaré”. ¿Sabes qué? Después de la escuela primaria, hay una escuela secundaria. Y después de que tu hijo termine la escuela secundaria, dirás: “Pienso que cuando mi hijo termine la universidad, entonces descansaré”. ¡Y nunca descansarás!

Quiero compartirte acerca de dos mujeres que se enfrentaron a un reto financiero durante una época de hambre. Naomi era una mujer de Dios y esto es lo que le dijo a su nuera Ruth.

Ruth 3:1…Hija mía, ¿no he de buscar hogar [“descanso” KJ] para ti, para que te vaya bien?

¿No es extraño que Naomi mencionara el descanso primero? ¿No está la naturaleza humana más inclinada a decir: “¿No buscaré que las cosas te vayan bien, para que entonces puedas descansar?”

Pero Dios quiere que Su naturaleza reine y Él te ama tanto que dice: “Ya estás sentado en el trono. Descansa primero. Siéntate hasta que ponga a los enemigos conquistados -esa situación financiera, ese síntoma en tu cuerpo- bajo tus pies.

Dios quiere que encuentres descanso en medio de la tormenta. Y cuando descanses en Él, las cosas saldrán bien. Esto no significa que no haya enemigos. ¡Pero reinarás en medio de tus enemigos! (Salmo 110:2).

El Salmo 23:5 dice que Dios prepara una mesa para ti en la presencia, no en la ausencia, de tus enemigos. Algunos de ustedes pueden decir: “Señor, ¿cómo puedes esperar que yo coma ahora? ¡Los síntomas todavía están en mi cuerpo! ¡Mi cuenta bancaria todavía muestra carencia! Señor, comeré bien y celebraré cuando todos mis problemas estén resueltos”. Pero la Biblia dice que Dios no sigue la naturaleza humana. Dios dice: “Ya prepararé una mesa. ¡Come primero! Comerás en la presencia de tus enemigos, y Yo me encargaré de tus enemigos”.

No Pospongas Tu Descanso

Isaías 53 describe el sufrimiento de Jesús y lo que él logró para nosotros en la cruz. Dice que Él llevó nuestras dolencias y ha cargado nuestros sufrimientos. ¡Él fue herido por nuestras transgresiones y molido por nuestros pecados, y por su herida, fuimos nosotros curados!

La razón por la que podemos descansar y regocijarnos en medio de nuestros enemigos es porque Jesús los derrotó cuando tomó nuestro lugar y llevó nuestros pecados en la cruz. Él lo ha hecho todo y la obra está completada. (Hebreos 10:12-14). Sólo necesitamos adoptar la actitud de estar sentados en el trono y descansar en él.

Mientras descansamos en su obra finalizada, ¿cuál debe ser nuestra actitud? ¿Cómo participamos de todo lo que Jesús ha hecho? Justo después de Isaías 53, la Escritura dice:

Isaías 54:1-3 Regocíjate, oh estéril, la que no daba a luz; levanta canción y da voces de júbilo, la que nunca estuvo de parto; porque más son los hijos de la desamparada que los de la casada, ha dicho Jehová. Ensancha el sitio de tu tienda, y las cortinas de tus habitaciones sean extendidas; no seas escasa; alarga tus cuerdas, y refuerza tus estacas. Porque te extenderás a la mano derecha y a la mano izquierda; y tu descendencia heredará naciones…

¡Jesús ha derrotado a los enemigos y Dios está diciendo a la mujer estéril que se regocije! La “mujer estéril” es una representación de alguien que no ha visto resultados, señales de salud en su cuerpo o señales de abundancia en su situación. Ser estéril no es la voluntad de Dios para ti. La Palabra dice que Dios nunca quiso que fuéramos estériles. Dios bendijo al hombre y le dijo que fructificara (Génesis 9:7). Así que en Isaías 54, Dios está diciendo: “¡Canta ahora y prepárate para tu bendición! ¡Haz más grande tu tienda y prepárate para el crecimiento! No te limites. Expande tu territorio y tus descendientes heredarán las naciones”.

Imagina que eres una mujer estéril cantando: “¡Aleluya! ¡Soy madre de muchos! ¡El Señor me ama!” El diablo vendrá y te dirá: “¿Madre de muchos? ¿Dónde está tu hijo? ¿No estás siendo hipócrita?” Pero no dejes de regocijarse. Dios quiere que disfrutes la vida antes de que el problema se resuelva. Empieza a cantar incluso antes de ver la solución. Deja de postergar tu alegría y tu paz. Deja de esperar la Navidad para celebrar. Haz de cada día una celebración de la vida, y aprende a descansar en medio de tus problemas.

Esta debe ser una actitud diaria, el ir a Jesús por nuestro descanso. Jesús mismo nos dice que vengamos a él y que él nos hará descansar.

Mateo 11:28 Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar.

Siempre que estés cargado de preocupaciones o angustias, presionado por el yugo de la ley, o en medio de cualquier enemigo que esté oprimiéndote, ve a Jesús y encontrarás reposo en él. Regocíjate, siéntate y apoya tus pies, porque Dios ha prometido que Él se ocupará de tus enemigos y hará que sean el estrado de tus pies.


Extraído del sitio “Joseph Prince Ministries”



Padre, Dios Todopoderoso, en el nombre de Cristo Jesús, te doy gracias por cada hijo tuyo que escucha esta enseñanza, mi Dios bendice sus preciosas vidas a tus ojos con salud, bienestar, prosperidad, sobre abunda todo bien en ellos, guárdalos como a las niñas de tus ojos de todo mal, protégelos a ellos y a los suyos de todo peligro y acechanza, que ninguna especie de mal venga sobre sus vidas, rodéalos con tu favor, que sus vidas, trabajos, familias y todas sus posesiones sean bendecidas por ti, guardadas bajo tu poderosa mano. Muéstranos tu verdad y amor! Muéstranos Tu santa Palabra que liberta el alma, y oro porque cada necesidad de orden físico, mental y espiritual sea abundantemente suplida para ellos y sus amados! Que tu gracia y poder reine en sus vidas y corazones y hazlos florecer en los atrios de Tu Casa, y que su fragancia de Cristo perfume tu Casa y a tus escogidos. Que veamos mas de Tu luz y gloria! Bendícenos Abba Padre, Jehová de los ejércitos, Dios todopoderoso, bendito y alabado sea tu santo nombre! Damos gloria, honra y honor a Tu santidad! En el nombre de Cristo Jesús, amén. 


Traducción por Claudia Juárez Garbalena


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