Donaciones
Fuera de México:

Check out with PayPal

PERMITE QUE EL SEÑOR SEA TU DEFENSA. De Joseph Prince


Salmos 94:22 Mas Jehová me ha sido por refugio [“defensa”], y mi Dios por roca de mi confianza.

Imagina ser una viuda pobre, un extranjero en la tierra y tener uno de los trabajos más humildes de la sociedad. Esa era la situación de Rut, por lo que habría sido fácil para ella sentirse vulnerable e indefensa. Pero debido a que ella confiaba en el Señor (Rut 1:16), Él la colocó bajo la protección de Booz.

Booz, el dueño del campo donde ella trabajaba, mandó a sus criados diciendo: “Permitan que recoja también espigas entre las gavillas, y no la avergoncéis” (Rut 2:15). Lo que Booz estaba diciendo a sus hombres era: “ella puede ser una espigadora, pero porque me preocupo por ella, trátenla con respeto y asegúrense de no avergonzarla”.

Booz es una representación de nuestro Señor Jesús. Si te estás sintiendo vulnerable e indefenso en este momento, imagina a Jesús ordenando a sus ángeles: “Cuiden de aquel que me pertenece. Asegúrense de que sea tratado con respeto y de que no sea puesto en vergüenza porque él o ella es alguien a quien amo y alguien por quien yo morí.

La Palabra de Dios nos dice que, si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros? (Romanos 8:31). Nadie que se opone a nosotros puede prevalecer porque si Dios es por nosotros, Su protección está sobre nosotros. Es por eso que nunca he respondido a los venenosos mensajes de correo electrónico que he recibido en el curso de mi ministerio.

Mi actitud es esta: Jesús es mi defensa. Si él no me defiende, eso significa que hay cosas en mi vida que no necesitan defensa. Porque tomo al Señor como mi defensa, y Él me defiende, ¿qué pueden hacerme los que están contra mí?

Cuando te defiendes a ti mismo, sólo tienes tus dos manos y tus propios recursos humanos. Pero cuando dejas que Jesús tome tu defensa, ¡él te defiende con sus manos que fueron atravesadas por clavos y con sus legiones de ángeles! Los resultados serán asombrosos.

Amado, el Señor es tu defensa y tu refugio. ¡Confía en él para defenderte y protegerte!


Extraído del sitio “Joseph Prince Ministries”


Comentarios