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ADQUIERE SABIDURÍA SOBRE TODAS TUS POSESIONES. Por Claudia Juárez Garbalena


Sabiduría ante todo; adquiere sabiduría; Y sobre todas tus posesiones adquiere inteligencia. Proverbios 4:7

He observado que como cristianos cometemos varios errores o hacemos ciertas omisiones que no nos permiten prosperar económicamente.

La primera y más grande de todas es depender del esfuerzo propio. Por supuesto que tenemos que trabajar y tener una remuneración por nuestro trabajo para prosperar, pero debemos ser conscientes de que nuestra fuente de suministro y abasto ES DIOS, porque Él es Quien nos da el poder de hacer riquezas.

Sino acuérdate de Jehová tu Dios, porque él te da el poder para hacer las riquezas... Deuteronomio 8:18a

Nuestra cultura no promueve la generosidad, así que pensamos que reteniendo lo que tenemos, tendremos más. Sin embargo, si imitamos a nuestro Padre y le pedimos que nos enseñe a ser generosos, Él nos mostrará un precioso camino en el que los primeros en ser bendecidos al dar SEREMOS NOSOTROS.

Hay quienes reparten, y les es añadido más; y hay quienes retienen más de lo que es justo, pero vienen a pobreza. El alma generosa será prosperada; y el que saciare, él también será saciado. Proverbios 11:24-25

También tendemos a no ser buenos administradores de lo que Dios nos da. Gastamos más de lo que tenemos, no ahorramos previendo el futuro, ni tampoco apartamos dinero para una situación imprevista. Gastamos en vacaciones, fiestas, ropa y otras cosas que sabemos que rebasan nuestro presupuesto, y pensamos que "Dios suplirá". Claro que podemos tener esas bendiciones, pero no es sabio que ese gasto sobrepase nuestro ingreso ya que podemos quedar atrapados en una gran deuda que puede hacerse como una gran bola de nieve. Seguir la guía de Dios es muy importante al hacer gastos, especialmente en gastos fuertes. Miremos lo que nos enseña el libro de sabiduría:

Sabiduría ante todo; adquiere sabiduría; y sobre todas tus posesiones adquiere inteligencia. Proverbios 4:7

La mano negligente empobrece; Mas la mano de los diligentes enriquece. Proverbios 10:4

El mundo tiende al despilfarro o a la tacañería, ambos extremos son malos y van en contra de los principios de la sabiduría de Dios.

Y un punto muy, muy importante que muchas veces omitimos, es el diezmar. Dios promete bendecir nuestros nueve décimos restantes si lo honramos con nuestro diezmo.

Honra a Jehová con tus bienes, y con las primicias de todos tus frutos; y serán llenos tus graneros con abundancia, y tus lagares rebosarán de mosto. Proverbios 3:9-10

Diezmar es un paso de fe que damos diciendo: ¡Mi Dios yo confío en ti!”. Dios protege nuestro ingreso, nuestra salud, a nuestras familias, nos libra de accidentes y catástrofes. Dios protege nuestros bienes y los hace duraderos. Puedes leerlo por ti mismo en el libro de Malaquías capitulo 3:10-12, sin embargo también nuestro Padre cuenta con que busquemos y apliquemos SU SABIDURÍA.

Es como cuando estamos creyendo por sanidad y comemos chatarra, nos desvelamos, no hacemos ejercicio, no seguimos las instrucciones médicas, pero hacemos la santa cena y oramos pidiendo a Dios buena salud o sanidad. ¡Él es poderoso para sanarnos! Sin embargo, depende de nosotros cuidar de "ese talento" (hablando de la parábola de los talentos) que Dios nos ha dado. Es igual con nuestros recursos, Dios nos suple, pero necesitamos Su sabiduría para administrar esos recursos 🙏🏻

Dios ha provisto de gran sabiduría en las Escrituras para prosperar. ¡Y es Su profundo deseo vernos prosperar!

Amado, yo deseo que tú seas prosperado en todas las cosas, y que tengas salud, así como prospera tu alma. 3 Juan 1:2

El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir; YO HE VENIDO PARA QUE TENGAN VIDA, Y PARA QUE LA TENGAN EN ABUNDANCIA. Juan 10:10

Los patriarcas prosperaron en medio de la hambruna. Las Escrituras dicen que hay bendiciones sobre la cabeza del justo (Proverbios 10:6). No dice que hay bendiciones sobre la cabeza de los justos cuando tienen las mejores circunstancias. ¡No! Dios es el mismo aquí y en China, ¡y lo ha sido desde la eternidad! ¡Nuestra parte es CREER SUS PROMESAS Y BUSCAR SU SABIDURÍA!

Yo oro para que tu entendimiento en este tema sea alumbrado, oro porque las compuertas del cielo sean abiertas para ti y los tuyos, oro porque recibas generosamente toda provisión celestial, oro porque nuestro Padre te abra camino, te dé una idea genial, oro por puertas abiertas para un mejor empleo, para la mejor posición, para que prospere tu negocio, oro para que los trámites que esperas para tu jubilación o lo que sea, sean prosperados y veas caer sobre tu vida Su bendición abundante, ¡Esa es Su voluntad! ¡Ese es Su gran deseo!

Deuteronomio 28 fue escrito bajo la ley, hoy vivimos en la administración de la gracia, pero el corazón y deseo de Dios no ha cambiado para con nosotros. Bajo la ley la gente debía con su obediencia ganar Sus bendiciones, hoy bajo la gracia, solo tienes que creer y recibir. Eres justicia de Dios en Cristo, coheredero con Cristo de las riquezas del cielo. Tienes derecho a disfrutarlas por lo que Jesús hizo por ti en Su descomunal sacrificio.

Y vendrán sobre ti todas estas bendiciones, y te alcanzarán, si oyeres la voz de Jehová tu Dios. Bendito serás tú en la ciudad, y bendito tú en el campo. Bendito el fruto de tu vientre, el fruto de tu tierra, el fruto de tus bestias, la cría de tus vacas y los rebaños de tus ovejas. Benditas serán tu canasta y tu artesa de amasar. Bendito serás en tu entrar, y bendito en tu salir. Jehová derrotará a tus enemigos que se levantaren contra ti; por un camino saldrán contra ti, y por siete caminos huirán de delante de ti. Jehová te enviará su bendición sobre tus graneros, y sobre todo aquello en que pusieres tu mano; y te bendecirá en la tierra que Jehová tu Dios te da.

…Y te hará Jehová sobreabundar en bienes, en el fruto de tu vientre, en el fruto de tu bestia, y en el fruto de tu tierra, en el país que Jehová juró a tus padres que te había de dar. Te abrirá Jehová su buen tesoro, el cielo, para enviar la lluvia a tu tierra en su tiempo, y para bendecir toda obra de tus manos. Y prestarás a muchas naciones, y tú no pedirás prestado. Te pondrá Jehová por cabeza, y no por cola; y estarás encima solamente, y no estarás debajo, si obedecieres los mandamientos de Jehová tu Dios, que yo te ordeno hoy, para que los guardes y cumplas. Deuteronomio 28:2-13

¡Vivimos bajo la gracia! Ese es Su favor totalmente inmerecido, la ley pone sobre nosotros la carga de LA DEMANDA, la gracia pone sobre nosotros la bendición DEL SUMINISTRO DE DIOS, ¡todo ha sido provisto bajo la gracia! Solo necesitamos apropiárnoslo POR FE.

Mira estas escrituras:

Porque todos los que dependen de las obras de la ley están bajo maldición, pues escrito está: Maldito todo aquel que no permaneciere en todas las cosas escritas en el libro de la ley, para hacerlas. Gálatas 3:10

Cristo nos redimió de la maldición de la ley, hecho por nosotros maldición (porque está escrito: Maldito todo el que es colgado en un madero), para que en Cristo Jesús la bendición de Abraham alcanzase a los gentiles, a fin de que por la fe recibiésemos la promesa del Espíritu. Gálatas 3:13-14

Estad, pues, firmes en la libertad con que Cristo nos hizo libres, y no estéis otra vez sujetos al yugo de esclavitud. Gálatas 5:1

Muchas veces me encuentro que estoy bajo la mentalidad de demanda (bajo la ley), en vez de la mentalidad de suministro (bajo la gracia) y eso tristemente me pone bajo maldición. ¡Dios no quiere eso en nuestras vidas! ¡Vayamos con denuedo al trono de Su gracia para recibir de Su amor y generosidad Su abundante suministro!

Todos vivimos épocas difíciles y demandantes y cosas imprevistas, pero Dios está ahí para nosotros. Mira hacia delante con la expectativa de ver a Dios moverse en tu vida poderosamente. Él llama a las cosas que no son como si fuesen, y da vida a los muertos, ¡Él trae vida donde no la hay!, ¡así que ten confianza en tu Padre celestial que vela por ti!

En Su amor,

Claudia Juárez Garbalena

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