LA ORACIÓN. Por Joseph Prince

Cuando leo la Biblia, me gusta hacer preguntas, cosas como, si Dios lo sabe todo, ¿para qué decirle a Él lo que tú quieres o necesitas? ¿Se han hecho preguntas como ésta alguna vez? si Dios lo sabe todo, ¿Por qué necesito decirle a Dios qué es lo que quiero o qué es lo que necesito? ¿Por qué necesito recordarle a Dios cosas? Dios quiere que le recordemos no porque se haya olvidado o porque no lo sepa todo. Él quiere que le recordemos porque Dios ama que Su gente se comunique con Él, es Su gozo y Su deleite y Su placer.

YO SÉ QUE DIOS ES CAPAZ DE RESPONDERME, PERO, ¿TAMBIÉN TIENE EL DESEO DE HACERLO?

¡Sí! Cuando tú oras por sanidad, Dios está más que deseoso de dar. Lo sabemos porque siempre vimos que Jesús sanó a los enfermos. La Biblia dice que en la cruz él cargó todas a nuestras enfermedades, así que la sanidad es tuya, ¡nunca lo dudes!

Cuando oras por tu familia, por el bienestar de tus hijos, la respuesta está garantizada. Si oras por protección divina, o cualquier tipo de liberación, la respuesta está garantizada. ¡Espérala!

¿DEBERÍA HACER ORACIONES LARGAS E INTENSAS?

Jesús nunca condenó las oraciones cortas, de hecho, él hizo oraciones simples. Las cosas que él decía eran: “extiende tu mano”, “levántate de tu lecho y camina” “mujer, tú fe te ha hecho sana”. Las sanidades que él hizo fueron con oraciones y declaraciones poderosas, con palabras simples.

La gente tiene la idea de que Dios debe ser persuadido para que nos escuche. Bueno, nadie persuadió a Dios para que enviara a Su Hijo. ¡Dios dio lo mejor del cielo, a Su propio Hijo!, ¿cómo no nos dará también libre y generosamente con él todas las cosas? ¿puedo tener un gran amén?

La oración no es nada más que una proclamación de fe. Dondequiera que tú proclames con fe, Dios llama eso la oración más poderosa.

MARCOS 11:23 PORQUE DE CIERTO OS DIGO QUE CUALQUIERA QUE DIJERE A ESTE MONTE: QUÍTATE Y ÉCHATE EN EL MAR, Y NO DUDARE EN SU CORAZÓN, SINO CREYERE QUE SERÁ HECHO LO QUE DICE, LO QUE DIGA LE SERÁ HECHO. 24 POR TANTO, OS DIGO QUE TODO LO QUE PIDIEREIS ORANDO, CREED QUE LO RECIBIRÉIS, Y OS VENDRÁ.